Deco, director deportivo del FC Barcelona, ya planifica la plantilla de la temporada que viene. El exfutbolista declaró a la revista portuguesa Nascer do Sol que "había que romper con el pasado". Según algunas informaciones, las palabras de Deco se han malinterpretado y no hacían referencia a la filosofía Barça como tal, sino a modificar algunos conceptos con la llegada del nuevo técnico.
El fichaje del entrenador, puesto que Xavi Hernández dejará el cargo el 30 de junio, es el pilar sobre el que construir un nuevo ciclo ganador. Este es el "cambio de paragima" al que, supuestamente, se refería el director deportivo del Barça en aquella entrevista.
Más preparación
La preparación de los encuentros no está siendo óptima. Como explicamos en Culemanía, el equipo de Xavi ha encajado un gol en el primer cuarto de hora hasta ocho veces. En 14 de 35 partidos, han empezado perdiendo. Los rivales sorprenden fácilmente al equipo. El Barça no fue capaz ni de ganar al Granada en Montjuïc, en un "partido de duelos", en palabras del míster de Terrassa.
El modelo de juego puede tardar en aplicarse, pero, aún así, los jugadores del primer equipo, sea quien sea el entrenador, deben ser capaces de sobreponerse en un cara a cara ante este tipo de rival. El club no tiene actualmente ningún jugador que le sume una marcha más al juego, que incite a ir a la presión. Menos aún, con la baja de Gavi. Tampoco está consiguiendo cambiar esta tendencia el preparador físico, Iván Torres, con el calentamiento previo a los partidos.
Tomar ejemplo de Europa
Las palabras de Deco pueden ir en este sentido. En el de subir el ritmo de los entrenamientos e incorporar jugadores que combinen dos aptitudes básicas: físico y calidad. La primera, se puede trabajar. El equipo debe mantener la misma intensidad durante los 90 minutos. Y las lesiones, si no son traumatológicas, se pueden prevenir, de cierta manera. Pep Guardiola en el Manchester City tiene a jugadores que poseen las dos habilidades. Kevin de Bruyne tiene una gran zancada, además de una técnica fuera de dudas. Erling Haaland, más de lo mismo. Rubén Días, el central, combina una gran corpulencia y una excepcional salida de balón. Incorporar físico no significa perder calidad.
Un ejemplo aplicable a la plantilla azulgrana es Robert Lewandowski. El delantero polaco presumía de un gran físico en su etapa como jugador del Bayern de Múnich. Y, si bien es cierto que los años pasan, el killer ha bajado su rendimiento progresivamente desde que se somete a los entrenamientos del club catalán.
Posibles fichajes de Deco
Las capacidades del Barça para fichar jugadores este verano son limitadas, si no se cumple con el presupuesto. Un nombre que demuestra lo que busca Deco es Amadou Onana, del Everton. A ojos del director deportivo, es un futbolista que puede aportar consistencia y físico, además de complementar a los jugadores técnicos que ya posee la plantilla azulgrana.
El mismo Vitor Roque no se caracteriza por una gran capacidad técnica, pero concentra algunos atributos decisivos, como el entendimiento de los espacios, un gran físico y mucho instinto goleador. En los pocos minutos que ha disputado, Tigrinho ha demostrado que puede ayudar al equipo, pero todavía está por ver si la gran apuesta de Deco sale bien.