El técnico del FC Barcelona, Xavi Hernández, ha ahondado en los motivos de su marcha a final de temporada este martes en la Ciutat Esportiva durante la rueda de prensa previa al Barça-Osasuna. El entrenador catalán ha lamentado que desde fuera no valoren lo suficiente el trabajo del staff en el funcionamiento. Aun así, ha reconocido que cambiaría los resultados y ha confesado que ya tenía tomada la decisión de abandonar el Barça en el tramo inicial de temporada.
"Nos tenemos que rodar más y atacar mejor y defender mejor. Estamos más vulnerables en defensa y el rendimiento como equipo ha bajado. El nivel futbolístico no es el adecuado, por eso mi decisión de no seguir. Llegué aquí en uno de los momentos más difíciles de la historia y creo que no se valora suficiente nuestro trabajo. A principio de temporada ya lo tenía decidido", ha manifestado el míster en la previa del encuentro de Liga contra el Osasuna.
Cronología de la decisión más difícil
Según ha podido saber Culemanía, uno de los puntos de inflexión fue la derrota contra el Arsenal en la gira americana, donde ya le llovieron críticas, tratándose de un amistoso. Allí ya empezó a darse cuenta de que esta temporada se le iba a hacer muy larga. Posteriormente, y antes de Navidad, Xavi ya lo transmitió a su entorno más directo, su mujer, Nuria Cunillera, y su hermano, Òscar Hernández. Pero el punto de inflexión fue la derrota contrta el Real Madrid en la final de la Supercopa. Ese fue el día en que Xavi ya confirmó que tenía tomada la decisión a varias personas cercanas, aunque evitó hacerlo público.
Xavi Hernández, durante el último entrenamiento del FC Barcelona
Preguntado sobre lo que hubiera cambiado de su trayectoria en el banquillo de Can Barça, el estratega egarense ha admitido que los resultados: "Los resultados. Eso es lo que nos ha fallado. Todavía hay dos títulos en juego y la situación es difícil. La Champions nos hace especial ilusión. La decisión es porque haga lo que haga no se valorará el trabajo".
Lo cierto es que el conjunto azulgrana ha acusado la falta de pegada y errores defensivos que han costado muy caros. Los puntos en Liga condicionan la opinión pública sobre la gestión del entrenador. Y el Barça esta temporada se ha dejado demasiados. Son los resultados las pruebas fehacientes que miden el rendimiento de los equipos. Cuando los resultados no acompañan a los aficionados no les bastan las palabras, solo los hechos --volver a ganar--.
Vestuario volcado
A pesar de la delicadeza del momento desde el vestuario se han volcado con el técnico y lo han arropado después de comunicar su salida: "Primero que no me vaya, que era una mala decisión. Entiendo que haya gente que no lo entienda. Espectacular. Me siento muy querido y esto no tiene precio. Creo que hemos hecho un buen trabajo, pero esta temporada no hemos estado a la altura. Hace falta aceptar la situación. Se han sentado unas bases para el futuro".
En los despachos, Xavi también agradece el apoyo del presidente Joan Laporta y los pesos pesados del área deportiva: "A nivel interno, todos. El máximo responsable y líder es el presidente. Me ha mostrado confianza y solo tengo palabras de agradecimiento. Creo que tenemos un gran presidente".