El FC Barcelona ha naufragado estrepitosamente en Riad. El Real Madrid ha castigado desde el inicio de la final de Supercopa al equipo de Xavi Hernández. El planteamiento del técnico catalán ha hecho aguas desde el minuto uno. El entrenador del Barça ha perdido manifiestamente la batalla táctica con Carlo Ancelotti, y ha cometido cinco errores con la gestión del equipo que han repercutido en la derrota final.
No es la derrota en sí, sino las formas. Y en diez minutos, la velocidad del Madrid ha triturado la zaga azulgrana. Aquella línea defensiva que tan solo había encajado 20 goles en 38 jornadas la temporada pasada, ha cometido dos errores de bulto que han decantado la balanza demasiado pronto. El míster ha ordenado a los tres centrales que adelanten su posición con tal de mantener un bloque alto.
No obstante, no ha tomado ninguna precaución para prevenir el riesgo de que le ganen la espalda a la zaga. En dos ocasiones prácticamente consecutivas, Vinicius Jr y Rodrygo Goes se han asociado para desarbolar la línea de zagueros. Primero, no han podido evitar que el 7 madridista les ganara la espalda después del error fatal de Jules Koundé en el corte. Y segundo, el otro delantero brasileño ha vuelto a evitar el fuera de juego en un pase por alto y se ha impuesto claramente a Andreas Christensen en la carrera al espacio.
Iñaki Peña, vendido
En dichos goles recibidos, Iñaki Peña ha quedado totalmente solo contra el peligro. A diferencia de Marc André Ter Stegen, el guardameta alicantino no ha adelantado su posición en sincronía con el resto del equipo. Poco le habría ayudado en el segundo tanto de Vini, producto de un pase de la muerte de Rodrygo.
Pero sí que habría podido servir en la carrera del primer gol. Y es que a Vinicius se le escapa el control. El portero del Barça podría haber salido a despejar en el instante del toque defectuoso del delantero. Sin embargo, estaba demasiado retrasado y no ha recibido la corrección táctica del técnico.
No potencia a Pedri
Otra carencia del equipo sobre el campo versa sobre el posicionamiento de Pedri. Xavi ha preferido colocar de interior izquierdo a Sergi Roberto y situar a Pedri en la derecha. Y eso que los ataques del conjunto barcelonista tendían a banda izquierda, pues Alejandro Balde se incorporaba por el carril. En cambio, por la derecha apenas ha asomado Ronald Araujo, más centrado en labores defensivas. El Barça habría ganado más dinamismo por la izquierda con la participación creciente del volante canario por ese costado.
El varapalo tempranero también ha desencadenado el repliegue masivo de los futbolistas merengues. La acumulación de futbolistas en el área precisaba de un atacante creativo como Joao Félix. Pero Xavi ha tardado en reaccionar. La inclusión del delantero portugués se ha demorado hasta el minuto 61. He aquí el cuarto error. Cuando el Madrid ha renunciado al pasacalles del primer tramo del envite, el encuentro demandaba la entrada del internacional luso.
En el carrusel de cambios, Xavi ha retirado a Pedri, por lo que se ha desvanecido la posibilidad de que pudiera asociarse por la izquierda con Joao Félix. Aunque esta sustitución puede obedecer a la exigencia física del partido y el poco rodaje del interior tinerfeño tras la lesión, el técnico ha perdido a uno de sus principales argumentos ofensivos.