El FC Barcelona ha tropezado nuevamente y con la misma piedra. La falta de efectividad en el área rival ha condenado al equipo azulgrana a regalar dos puntos en Mestalla (1-1). Ocho tiros a puerta del Barça se han traducido en un único gol durante 90 minutos. Y la ausencia de contundencia para defender un balón dividido en el que Hugo Guillamón ha creído más que nadie ha desembocado en el empate del Valencia.
"Todo lo que no fueran tres puntos aquí era un duro palo para nosotros. Hemos hecho muchas cosas bien, pero ha faltado meter el gol de la victoria. Creo que el juego lo hemos mejorado mucho respecto al partido contra el Girona, pero hay que seguir", ha lamentado Pedri en los micrófonos de Movistar Plus.
Vendaval de ocasiones
Solo en la primera parte, Robert Lewandowski ha tenido en sus botas dos goles. El delantero polaco ha rematado de tijera un pase alto de Ilkay Gundogan, pero Giorgi Mamardashvili ha reaccionado con las manoplas para repeler la volea en el palo corto. Al filo del descanso, el killer del Barça ha perdonado un mano a mano que ha intentado resolver mediante una vaselina que ha muerto en los guantes del guardameta. En la reanudación, el mismo Lewan le ha ganado la partida a los centrales por un balón al espacio, pero ha dirigido otra volea fuera de portería.
Precisamente, esta última oportunidad ha precedido el gol, que ha iniciado un pase de cuchara de Frenkie de Jong entre el lateral y el central valencianistas. Raphinha ha resuelto el mano a mano con un pase de la muerte a Joao Félix, que ha rematado a puerta vacía.
Quien perdona...
Tras el tanto, el cuadro catalán ha perdonado una barbaridad de ocasiones para sentenciar la contienda. Otro remate de Joao Félix se ha estrellado en Cristhian Mosquera en su camino a portería. Pedri ha mandado por encima del larguero un disparo desde la frontal, y Mamardashvili ha sacado por bajo un tiro de Raphinha al palo corto.
Prácticamente, el equipo che no había generado peligro en el segundo tiempo. Hasta que un mal centro de Fran Pérez ha botado en el área sin que ningún futbolista intervenga. Diego López ha ganado la segunda pelota, ha cedido para Hugo Guillamón, y ningún central le ha saltado a defender un posible tiro en el balcón del área. Con el espacio suficiente, el centrocampista del Valencia ha colocado un misil en la escuadra, imposible para Iñaki Peña, que ha echado por tierra el vendaval de ocasiones.
Para más inri, Raphinha ha perdonado otro uno contra uno del que ha salido vencedor Mamardashvili. El extremo brasileño no ha podido romper las tablas en el marcador al estrellar con potencia su definición contra el brazo del portero. El balón rebotado sí que ha superado al arquero, pero el lateral Yarek ha rechazado el segundo tiro bajo palos. Ya en el tiempo de prolongación, Ferran Torres no ha podido definir frente al meta tras pinchar un pase largo de Pedri.