Xavi Hernández se encuentra en un momento complicado. Los malos resultados y la irregularidad en el rendimiento de su equipo le dejan en el foco de las críticas. Se trata de un contexto que se asemeja al que vivió Ronald Koeman hace poco más de dos años. Esas similitudes con respecto a su situación en el banquillo del FC Barcelona son lo que está provocando que empiece a tener la misma cara que su predecesor en el cargo.
La confianza de la directiva
En la previa del partido contra el Valencia, el entrenador egarense aseguró que siente totalmente respaldado por Joan Laporta y Deco para continuar liderando al primer equipo en lo que queda de temporada: "No me he sentido solo, no me siento nunca solo. Tengo primero al staff que son leales y fieles y no me fallarán nunca. Primero porque está mi hermano y luego amigos en mayúsculas, y estos no fallan. Y el presidente no me ha fallado nunca, ha cumplido siempre lo que me ha dicho. Y me siento respaldado por Yuste, por Deco, antes por Mateu y por Jordi".
Sin embargo, el problema hay un montón de noticias e informaciones que provienen de diferentes sectores que invitan a pensar lo contrario, sobre todo porque se tratan de filtraciones que chocan entre sí. Ese mismo contexto se dio en su momento cuando Ronald Koeman estaba en el banquillo azulgrana, recordando que el técnico neerlandés aseguraba que también contaba con el apoyo de Laporta en los tramos de mayor crisis de resultados y de juego.
El plan B de Laporta
Laporta quiso mandar un mensaje de tranquilidad al barcelonismo en plena cena de Navidad, pero eso no quiere decir que no tenga un plan de respaldo en caso que Xavi no consiga enderezar el rumbo de la plantilla. Cuando Koeman estaba en el equipo, el máximo dirigente del FC Barcelona daba cierto respaldo al entrenador, aunque a puerta cerrada planificaba su posible destitución si los resultados no mejoraban de forma contundente, algo que terminó sucediendo el 28 de octubre de 2021.
Joan Laporta hablando con Ronald Koeman, junto a Rafa Yuste
En aquel entonces se decidió acordar la llegada de Xavi Hernández para sustituir al neerlandés. Dos años después, el escenario se puede repetir ante la creciente posibilidad de que Rafa Márquez asuma el cargo de entrenador del primer equipo. Por ahora, el de Terrassa cuenta con un poco de margen para tratar de dar vuelta a la situación, teniendo en cuenta que a su favor están la Supercopa y la Liga que fueron conquistadas en la temporada anterior. Ese tiempo es lo que evitaría que se repita el mismo contexto de Koeman.