El Barça se gustó y sufrió contra el Shakhtar. No hay partido tranquilo para el equipo de Xavi Hernández, que ya suma nueve puntos de nueve posibles en la Champions. Ferran Torres y un Fermín superlativo firmaron la victoria azulgrana, tres días antes de recibir al Real Madrid en la Liga. A falta de buen fútbol, el Barça se agarra a los resultados, pero deberá mejorar mucho para ser competitivo en el clásico.
Xavi Hernández avisó de que no era el momento de hacer experimentos, pero agitó su defensa, condicionado por la inminente visita del Real Madrid y por el potencial físico del Shakhtar. Iñigo Martínez y Marcos Alonso entraron en el once titular en detrimento de Christensen y Balde.
El gol de Ferran
El Shakhtar quiso desafiar al Barça con un fútbol bien elaborado, buscando una salida limpia del balón, pero se diluyó como un azucarillo en el tramo final del primer acto. Su descenso coincidió con la explosividad de Fermín, frenado en primera instancia por Riznyk, que pide paso en un equipo que va al límite.
El Barça fue de menos a más. Madurando el partido. Poco a poco se adueñó del centro del campo, con Joao Félix moviéndose muy bien entre líneas, pero fue el otro Joao, Cancelo, quien tuvo una clara ocasión parar marcar. Apretaba el equipo azulgrana y menguaba el Shakthar, batido por Ferran Torres, de volea, tras un remate inicial de Fermín que repelió el palo.
El gol de Fermín
El gol animó al Barça y, sobre todo, a Fermín, muy crecido y con una dosis extra de confianza. El centrocampista, muy vertical, aprovechó una rápida acción para batir a Riznyk con zapatazo que se coló en su portería tras tocar el poste.
El Shakhar no se entregó y volvió a ser reconocible en los primeros compases de la segunda parte. Sin nada que perder, el equipo ucraniano quiso ser pulcro, pero el Barça penalizaba sus pérdidas, aunque levantó el pie del acelerador.
Falta de tensión
El Barça parecía tener el partido controlado. Ganado. Pero la falta de tensión castigó al equipo de Xavi en un despiste de Oriol Romeu e Iñigo Martínez que aprovechó Sudakov para batir a Ter Stegen, inédito hasta entonces.
El equipo de Xavi se sintió amenazado con el gol del Shakhtar. Solo se calmaba el Barça cuando tenía la pelota, sobre todo Fermín, omnipresente durante todo el partido, que estrelló una pelota en el poste y luego vio cómo le anulaban un gol por fuera de juego.
El partido se animó y Xavi dio entrada a Balde y Marc Guiu por Marcos Alonso y Joao Félix, que se retiró con molestias musculares. Luego entraron Christensen y Casadó para amarrar un duelo que se complicó hasta el final. Sufrió el Barça, pero ya suma nueve puntos en la Champions y los octavos de final están cada día más cerca.