Sergio Conceiçao, técnico del Oporto, acabó frustrado tras la derrota de su equipo contra el Barça. Normal. El grupo blanquiazul fue penalizado por un error defensivo y en la segunda parte asfixió a un Barcelona desbordado en algunas ocasiones. Conceiçao no encajó bien el resultado y al acabar el partido cargó contra el árbitro, que ignoró un posible penalti de Koundé en la primera parte y anuló otro por manos a Cancelo en el segundo acto. En Oporto, seguramente, se acordaron con sus palabras de José Mourinho.
"¿El árbitro? Jugamos contra más que un club", comentó Conceiçao al acabar el partido en las entrevistas a las televisiones con derechos de imagen.
Conceiçao rescató, por un día, el discurso de Mourinho, quien constantemente denunció presuntos favores arbitrales al Barça cuando era el entrenador del Real Madrid.
El 'caso Negreira'
Las quejas de Conceiçao, además, coinciden en un momento delicado para el Barça por el recorrido judicial del caso Negreira.
El entrenador del Oporto, no obstante, también asumió los problemas que detectó en su equipo. "Creo que nos faltó algo más, porque provocamos pérdidas en el último tercio del Barça, especialmente en la primera parte, pero no supimos aprovecharlas. Pero estoy orgulloso del trabajo de nuestros jugadores y de cómo acabamos el partido, intentando empatar de cualquier manera", dijo en rueda de prensa.
La autocrítica
Conceiçao, frustrado, sentenció: "Debemos estar concentrados todo el partido, creo que fue una pena que nos hicieron el 0-1 al final de la primera parte. Teníamos que estar metidos los 90 minutos".