Cierto es que todavía no se ha estrenado a nivel goleador con el primer equipo del FC Barcelona. Pero es que hace apenas unas semanas tenía 15 años. De momento, Lamine Yamal se conforma con seguir asistiendo a sus compañeros, lucir un juego efervescente y batir récords de precocidad. El último, el que le ha permitido convertirse en el segundo jugador más joven en debutar en la Champions League en toda la historia de la competición.
Lo ha hecho a los 16 años y 68 días. Tan solo le supera Youssoufa Moukoko (16 años y 18 días) con el Borussia Dortmund, si bien es cierto que sigue existiendo una gran polémica sobre la edad real de dicho futbolista. Algunas fuentes no oficiales señalan que tendría cuatro años más de la edad que aparece en sus documentos.
Lamine Yamal sigue haciendo historia
Sea como sea, Lamine Yamal está en el podio de esta llamativa y precoz estadística. Y por detrás tiene a Céléstine Babayaro (16 años y 86 días). El del barrio de Rocafonda, en Mataró, ingresó sobre el terreno de juego en el minuto 68 sustituyendo a Raphinha, y pulverizó de paso el registro de Ansu Fati, que debutó con 16 años y 321 días en un partido frente al Borussia Dortmund.
Aquello fue un 17 de septiembre de 2019, y ha llovido desde entonces. Lamine lo ha hecho con 16 años y 68 días, y ahora ya sólo le falta convertirse en el goleador más precoz de la historia del FC Barcelona y también de la Champions League, algo que se espera que consiga a lo largo de la presente temporada 2023-24.
Objetivo: quitar otro récord a Ansu
Este último récord, eso sí, todavía recae en su compañero Ansu Fati. El hispano-guineano ostenta el registro desde el 10 de diciembre de 2019, cuando marcó contra el Inter en el Giusseppe Meazza cuando tenía 17 años y 40 días.