Jaume Roures juega a dos bandas con la Liga y el Barça

En el fútbol, como en la vida, la picaresca y la estrategia juegan un papel importante. Y si uno está en disposición de controlar una gran porción del pastel futbolístico, ¿por qué iba a conformarse con una pequeña parte? Jaume Roures es una de las caras más conocidas y poderosas del balompié español. Del que se mueve entre bambalinas. Y su alargada sombra le permite jugar a dos bandas entre la Liga y, cada vez más, transatlánticos como el FC Barcelona.

La cercanía de Roures con Tebas y la Liga

No en vano es el administrador único de Mediapro, compañía que posee los derechos televisivos de la Liga y, además, la encargada de la producción y realización audiovisual de todos los partidos del campeonato. Por tanto, es el responsable de lo que se emite o se censura en cada una de las retransmisiones. En sus manos está el poder de gestionar lo que se vea por TV, cualquier imagen de lo que suceda en un partido de la Liga de Javier Tebas.

Jaume Roures, como es lógico, también tiene un peso importante en la gestión de los derechos de la Liga con DAZN y Movistar Plus, las dos plataformas que emiten la competición esta temporada 2022-23 en España. Otro de los elementos que le relaciona directamente con la Liga de Tebas es la lucha conjunta contra la piratería en el fútbol, algo en lo que son aliados desde hace años. Por interés mutuo, claro.

Los vínculos de Roures con el Barça de Laporta

El hecho de que Roures esté tan unido a la Liga --en una especie de matrimonio de conveniencia--, y que la patronal esté lidiando desde hace tiempo una guerra latente con el FC Barcelona de Joan Laporta, no impide que el magnate audiovisual también mantenga negocios abiertos con los culés. Fue el avalista de Laporta para que éste pudiera regresar formalmente a la presidencia, y a finales del pasado verano ayudó al presidente azulgrana con una de las palancas.

Joan Laporta recibe la ayuda de Jaume Roures para conseguir el aval / CULEMANIA

Joan Laporta recibe la ayuda de Jaume Roures para conseguir el aval / CULEMANIA

Concretamente, se hizo con el 24,5% de Barça Studios a través del pago de 100 millones de euros por parte de una de sus empresas: Orpheus Media. Una organización dedicada a la compra y venta de obras de arte, y que es de su propiedad como tantas otras. Aunque según aseguró el periodista Sique Rodríguez tres meses atrás, Jaume Roures todavía no habría ingresado al Barça la totalidad de los famosos 100 millones de euros.

Barça Studios aparte, los tentáculos de Roures también tocan al Barça en lo que respecta al museo del club. Mediapro Exhibitions, la división de GRUPO MEDIAPRO especializada en la creación y desarrollo de exposiciones y museográficos, es la que está llevando a cabo la gestión y transformación del nuevo museo, que se ubicará de forma temporal en el Palau de Gel hasta que finalicen las obras del Espai Barça.

El empresario catalán ya llevó a cabo la reforma del actual museo en el año 2010. Y, para colmo, constituyó en una notaría de Barcelona, el 12 de abril de 1995, la Fundación Johan Cruyff. El holandés fue, precisamente, el gran vínculo que relacionó a Roures con Laporta, puesto que el actual presidente del Barça llegó a ser gran amigo y admirador de la leyenda azulgrana.

Imagen virtual del FC Barcelona sobre el Museo / FCB

Imagen virtual del FC Barcelona sobre el Museo / FCB

Dejó expuesto al Barça en el caso Negreira

Que Jaume Roures se mueve a dos bandas es indudable, al estar probado que mantiene intereses cruzados tanto en la Liga como en el Barça. Por eso es capaz de ofrecer una de cal y otra de arena en sus declaraciones, castigando a veces a la patronal de Tebas y otras a la entidad que preside Jan. Hace unos días, dejó expuesto al Barça con el caso Negreira y echó al mandatario culé al foso de los leones. "Lo de Negreira destapa una capacidad de sorpresa impresionante. El Barça lo puede pagar muy caro. Recordemos que ya fue investigado hace años, con Rosell y Bartomeu, por el traspaso de Neymar. Ahora faltan muchas explicaciones y hay que condenar lo ocurrido", remarcó en primera instancia.

Y a continuación, añadió más elementos indiciarios y perjudiciales para el Barça: "Yo, hace años, había visto regularmente a Enríquez Negreira en el palco del Camp Nou y se decía que su papel era que hacía los informes, pero no para el Barça sino para el comité de árbitros; para calificar la actuación del árbitro en aquel partido, si lo había hecho bien, mal o regular. Es decir, que él tenía un poder para apartar, o no apartar, o promocionar o lo que fuese… digamos que no era neutro aquello… tenía un cargo importante y, evidentemente, yo supongo que lo ejercía”, soltó.

El ataque inesperado a Tebas y a la Liga

Puede que para compensar la balanza, este viernes protagonizó un ataque a la Liga de Tebas, defendiendo claramente al Barcelona en lo que respecta al control económico, la validez de las palancas y la gestión de la masa salarial. "Yo lo que no entiendo son los cambios a mitad de partido. Y me explico: el Barça ha hecho un esfuerzo grandísimo para bajar la masa salarial, pero hay cosas que no se pueden cambiar y son los contratos que están en vigor con los jugadores. Estamos hablando de muchos millones", puso en contexto Jaume Roures.

Javier Tebas y Jaume Roures en una imagen de archivo / EFE

Javier Tebas y Jaume Roures en una imagen de archivo / EFE

"Si aquellas operaciones en su día fueron aprobadas por la Liga, se tendrían que tener en cuenta en la actualidad. La responsabilidad de la masa salarial no puede recaer al 100% en la junta directiva del Barça", apostilló el máximo mandatario de Mediapro, lanzando un dardo a Tebas sobre la competitividad de la Liga con potencias como la Premier League, ahora mismo fuera de alcance. 

"Si las palancas eran aptas la temporada pasada, ahora no se puede decir que no lo son. Hay que tener una coherencia. No se pueden cambiar las reglas a mitad de partido. La Liga no existe para el control económico, sino para que sea competitiva. La competición se tiene que mantener al nivel, no puede bajar porque sino no seremos competitivos en los mercados”. El juego a dos bandas, en definitiva, queda comprobado. Y Jaume Roures, con cada uno de sus movimientos y declaraciones, demuestra moverse en él como pez en el agua.