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La palabra 'inscripción' trae dolores de cabeza hasta al culé más positivo. Los últimos veranos han sido verdaderas carreras contrarreloj para garantizar el registro de los nuevos fichajes. Este curso no será la excepción. Ni mucho menos. El FC Barcelona afronta el cierre de mercado con el reto mayúsculo de inscribir a Joan García, Szczesny y Marcus Rashford. Sin embargo, Deco y Laporta tienen un as bajo la manga que podría ser de muy buen uso si la situación se descarrila. Consiste en aprovechar una nueva norma de La Liga.

Ter Stegen hace saltar todo por los aires

Hace poco menos de una semana, el escenario en referencia a las inscripciones parecía estar relativamente solucionado. La lesión de Marc-André ter Stegen permitía asegurar el registro de Joan García implementando el artículo 107 del Reglamento General de la competición. Asimismo, tras el comunicado del portero germánico todo se ha torcido.

La tristeza de Ter Stegen, capitán del Barça, tras sufrir una lesión REDES

En dicho escrito, Ter Stegen hace alusión a sus problemas con la espalda, que le harán pasar por quirófano una vez más, y establece un tiempo de recuperación de tres meses. La duración de la rehabilitación del meta de Monchengladbach es la clave de todo. El artículo anteriormente mencionado solo contempla el intercambio de fichas entre jugadores en el caso de una lesión de gravedad que aparte al lesionado del césped al menos durante cuatro meses

Ter Stegen y Hansi Flick en un montaje sobre el Camp Nou Culemanía

Cabe destacar aquí que tanto el Barça como la Liga apuntan a que el diagnóstico lo tiene que hacer un doctor y no un futbolista. Ambas entidades, habitualmente enfrentadas, están de acuerdo en este punto. Pero aún en el caso de que finalmente la baja fuese inferior a cuatro meses, el club contempla otros escenarios para gestionar la situación. Si todo se va de madre, Laporta y Deco manejan una última alternativa.

La inscripción a cámara lenta

El Barça podría aprovechar la implementación de una nueva norma de La Liga, conocida como la inscripción a cámara lenta. Dicha regla permite a los clubes conseguir saldo de inscripción de modo anticipado. Lo ha explicado Javier Gómez, Director General Corporativo de la institución liguera, en una entrevista con el empresario Héctor Mohedano.

Joan Laporta y Javier Tebas, en un fotomontaje con la sede de la Liga de fondo MONTAJE CULEMANIA

La norma forma parte de las nuevas flexibilizaciones económicas que permite La Liga. La clave está en la regla de 'inscripción a cámara lenta', que permite inscribir a hasta tres jugadores de forma provisional sin que sea necesario cumplir en ese instante con el Fair Play Financiero. Evidentemente hay una condición. El Barça debe generar el espacio salarial pendiente durante el transcurso de la campaña y devolverlo al final del curso. Básicamente, se prorroga el margen de inscripción con un fondo a reembolsar a futuro.

Un fichaje, dos libres

Esta congregación de tres futbolistas también debe cumplir una serie de condiciones, aunque no contabiliza un importe máximo en las fichas de los jugadores. Solo uno de ellos puede haber llegado al club en forma de traspaso. Los otros dos tienen que ser agentes libres. En el caso del FC Barcelona, existe una rendija que podría garantizar la inscripción tanto de Marcus Rashford como de Szczesny y Joan García. En el caso del extremo inglés, en realidad, no es necesaria, ya que al llegar como cedido, tiene solo contrato por una temporada. Es en los otros dos casos donde se podría aplicar esta nueva norma. 

La regla establece que si el precio de la incorporación es inferior al 1,5% del INCN (Importe Neto de la Cifra de Negocio) puede ser considerada como una llegada libre. En el caso del pago de la cláusula de Joan García, dicha cifra no llega al indicador, por lo que podría computar como agente libre. De esta manera, Rashford sería considerado como el futbolista traspasado y el portero de Sallent como libre.

Deuda de margen para la siguiente campaña

Esta opción es admitida por La Liga con un matiz importante. Tal como explica Javier Gómez, el espacio salarial conseguido a través de dicha vía se resta automáticamente del margen disponible en la temporada en curso. Además, el factor más importante es que el dinero de más usado para inscribir a los futbolistas se considera una deuda de margen que el club deberá recuperar la siguiente campaña.

Javier Gómez, Director General Corporativo de La Liga La Liga

Gómez reduce precisamente esto en una frase: "Para poder volver a inscribir a algún jugador, lo primero que deberán hacer los clubes que hayan usado la regla es buscar el saldo de los futbolistas anteriormente inscritos a partir de la norma".

Alternativa contrarreloj

La alternativa representa una salvación temporal para el FC Barcelona. Al fin y al cabo, sería implementar una procrastinación de los deberes inscriptivos, ya que la temporada siguiente volverías a encontrarte el mismo problema si no has trabajado para solucionarlo durante el curso. Asimismo, puede ser muy clave a expensas de lo que termine pasando con la validación de la venta de los 475 asientos VIP del Camp Nou y los 42 millones a cobrar de New Era.

Joan Laporta, presidente del Barça, y Nihat Özdemir, presidente de Limak, en los asientos Vip del Camp Nou REDES

Precedentes similares

Aunque la regla representa una novedad legal en la normativa de La Liga, ya se han visto casos parecidos en la historia reciente del fútbol español. De hecho, en el mismo Barça. Un ejemplo evidente es el de Iñigo Martínez, que tuvo que ser inscrito temporada a temporada tras complicaciones con su registro desde que aterrizó en Can Barça en el curso 2023-24. Se le inscribió sobre la bocina en el verano de 2023 y, al año siguiente, gracias a la lesión de larga duración de Ronald Araújo como vía de escape para asegurar su inscripción. Por último, su tercer año de contrato fue inscrito en febrero de 2025, cuando el Barça estaba en la norma 1:1. 

Iñigo Martínez celebra su gol contra el Atlético de Madrid EFE

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