La brecha económica con las secciones del Real Madrid: indiferencia con el femenino y apuesta por un basket deficitario

El Real Madrid de basket lidera con puño de hierro la Liga ACB. Los pupilos de Chus Mateo han doblegado al Barça en los cinco clásicos oficiales que se han enfrentado durante la temporada 2024-25. El club blanco domina en la sección de baloncesto a la entidad presidida Joan Laporta, diezmada por las lesiones y los recortes presupuestarios. En el fútbol femenino, a pesar de la polémica victoria madridista en el Estadi Olímpic Lluís Companys, el FC Barcelona ha instaurado una hegemonía que el eterno rival no ha amenazado en cinco años de vida. 

Desde la creación de la sección merengue en 2020 mediante la compra del CD Tacón, el equipo que entrena Alberto Toril no ha levantado ningún título. El Real Madrid dispone del segundo presupuesto más alto de la Liga F, con una inversión de 9 millones de euros prevista para la temporada 2024-25. Con esto, gasta la mitad que el Barça en el fútbol femenino, a pesar de los beneficios potenciales. En cambio, la institución presidida por Florentino Pérez mantiene una astronómica inyección de 44,5 millones en el basket, con una previsión negativa de 19 millones en el resultado del ejercicio.

Barça Femenino, mejor ejemplo

El Barça Femenino es el mejor espejo en el que reflejarse en los despachos. Laporta ha sacado el jugo a una sección que constituye el mayor orgullo deportivo después de alzar el póker de títulos en la campaña 23-24. Las estrellas azulgranas no solo brillan en el campo, sino también reportan una lluvia de millones al club catalán: 17,3 kilos ingresados en el ejercicio 23-24, récord histórico, por encima del baloncesto, y 600.000 euros de beneficios. El resto de deportes profesionales de la entidad resultaron deficitarios.

Las jugadoras del Barça celebran un gol ante el Wolfsburgo EFE

La inversión ya ha demostrado tener un retorno. Con esto, la apuesta por el fútbol femenino había comportado un camino de pérdidas hasta alcanzar el soñado break even. El bien mayor ya ha llegado en forma de rentabilidad y hegemonía nacional, a la par que internacional. 

Inversión al alza

En Valdebebas no miran con los mismos ojos al Real Madrid Femenino todavía. Lo cierto es que la apuesta económica ha seguido una línea ascendente desde la fundación del equipo. La temporada 21-22, la plana mayor merengue inyectó 5,1 millones, traducidos en 1,5 millones de ingresos. En el curso 22-23, se gastaron 8 millones y se facturaron 7,4 millones.

El Real Madrid Femenino celebra un gol en Montjuïc EFE

No obstante, en el tramo 23-24 la inversión se contuvo hasta los 7,1 millones, a pesar de culminar con recaudación máxima de 10,5 kilosy 3 millones de beneficios. Nuevamente, de cara a la temporada 24-25, se han presupuestado 8,9 millones de gasto al alza y 10,5 millones de facturación. En consecuencia, las ganancias retrocederían hasta los 1,6 millones. 

Apuesta insuficiente

En el terreno de juego, la apuesta financiera in crescendo aún no ha conseguido eludir las palizas del Barça. El equipo azulgrana levantó la Supercopa Femenina con manita (5-0) y apeó al cuadro merengue en las semifinales de la Copa de la Reina (0-5 y 3-1). En el propio vestuario madridista ya han levantado la voz contra la falta de inversión respecto al eterno rival. Melanie Leupolz, centrocampista alemana, reflexionó sobre el respaldo del club por la sección en el podcast Kicker FE:male.

"¿Se invierte primero y luego se tiene éxito o se espera a que el éxito se logre y entonces se invierte? (...) El Barcelona ha venido en su propio avión, luego va al clásico, vuela un rato a Madrid y luego vuelve a casa. Nosotros vamos en tren y nos quedamos una noche en un hotel, jugamos, nos quedamos otra noche en un hotel y al día siguiente nos vamos a casa", cuestionó la mediocampista días antes de superar al Arsenal en la ida de los cuartos de la Champions League (2-0).

Las jugadoras del Real Madrid Femenino celebran embadurnadas de barro la victoria sobre el Arsenal en la Champions League EFE

Precisamente, el conjunto que remontó posteriormente el duelo de vuelta liderado por la exazulgrana Mariona Caldentey (3-0) salió indignado por el estado del campo del Estadio Alfredo Di Stéfano. Ian Wright, leyenda del equipo londinense, se despachó contra el club blanco: "Viendo cómo estaba el campo del Real Madrid en unos cuartos de final de la Champions League, esto es peor que el de Pride Park --estadio del Derby County que albergó la League Cup femenina en malas condiciones--. Es una jodida vergüenza que estas chicas tengan que jugar en estos campos". 

El basket, a pérdidas

Paralelamente, el basket sí que llena las vitrinas del WiZink Center, impulsado por una apuesta más generosa que no da beneficios. Sobre la pista, los pupilos de Chus Mateo levantaron la Liga ACB 2023-24 y la Copa del Rey. Este curso, se les han resistido tanto la Supercopa como la Copa, con sendos subcampeonatos, pero lideran la competición doméstica y luchan por la clasificación directa a los playoffs de la Euroliga. El Madrid Femenino ya solo opta a la Liga F, cuatro puntos por detrás del Barça.

Los jugadores del Real Madrid de basket celebran una victoria Redes

El gasto desorbitado ha disminuido ligeramente desde la campaña 22-23, cuando se invirtieron 49,8 millones, se facturaron 22 millones y el baloncesto merengue saldó el curso con 28,3 kilos de pérdidas. En el ejercicio 23-24, la sección logró aumentar los ingresos hasta los 25,1 millones y contener el desembolso hasta los 46,4 millones. De todos modos, culminó la campaña con una merma de 20,8 millones. En cuanto a la vigente temporada 24-25, se ha presupuestado una recaudación de 23,4 millones, una inversión de 44,5 millones y pérdidas de 18,9 millones. Un pulso deficitario que se libra con el Barça y otros tiburones europeos en las aspiraciones de conquistar títulos.