El Camp Nou cumplirá 67 años el próximo 24 de septiembre. En obras desde hace más de un año, su transformación ha sufrido grandes cambios en los últimos meses. Joan Laporta modificó, sustancialmente, el proyecto de Josep Maria Bartomeu, adaptándolo a los nuevos tiempos y acelerando su construcción con el impopular traslado al Olímpic Lluís Companys. En diciembre de este año, el Barça podría regresar ya a su casa, con el aforo limitado, pero el nuevo Camp Nou no estará totalmente terminado hasta verano de 2006. "Volverá a ser el mejor estadio del mundo", sostiene Laporta.
El presidente del Barça está cada vez más satisfecho con la metamorfosis del Camp Nou, un estadio vanguardista en 1957 que solo ha sufrido dos reformas importantes en su historia. Ambas, con Josep Lluís Núñez como presidente. En 1982, el expresidente construyó la tercera grada y amplió su capacidad hasta los 120.000 espectadores. En 1994, hundió la primera grada y comenzó la eliminación de las gradas de a pie.
Los cambios del Camp Nou
"La reforma del Camp Nou empieza con 20 años de retraso", sostienen Laporta y su junta directiva. En 2006, el actual presidente ya tenía un plan para renovar el estadio. Entonces encomendó la transformación a Norman Foster y el coste ascendía a 240 millones de euros.
Casi dos décadas después, el Camp Nou se prepara para recuperar la magia que tuvo durante muchos años. Seguirá siendo un estadio abierto y mediterráneo. Un estadio con una amplia oferta de asientos VIP, con escaleras mecánicas y ascensores. Con 3.000 plazas de parking.
Asientos cubiertos
El nuevo Camp Nou seguirá siendo el campo más grande de Europa y el tercero del mundo, con 104.600 asientos, todos cubiertos. Contará con una cubierta de 48.000 metros cuadrados y espectacular mirador. También tendrá tres marcadores de última tecnología, tras descartarse un videomarcador de 360 grados que sí tiene el Santiago Bernabéu, el estadio del Real Madrid.
Laporta calcula que el Barça ingresará 340 millones de euros anuales con la explotación del nuevo Camp Nou, que tendrá un espectacular boulevard entre la primera y la segunda grada, con una gran oferta comercial. También tendrá un nuevo museo, más grande e interactivo, y un entorno sin barreras arquitectónicas, con más espacios verdes, oficinas y un hotel.