El Barça, a la espera todavía de Nico Williams, tiene muchos jugadores en nómina. Demasiados. El club que preside Joan Laporta ya ha activado la operación salida y Hansi Flick, el nuevo entrenador, ha dado luz verde a la venta de un futbolista con mucho futuro.
Mika Faye, defensa senegalés de 20 años, es un jugador con un gran potencial físico. Es un diamante por pulir. Sin embargo, Flick cree que no es un futbolista de rendimiento inmediato y el Barça lo ha puesto en el mercado.
Muchos centrales
Con Araujo, Koundé, Christensen, Iñigo Martínez, Éric García y Pau Cubarsí en el equipo, Deco busca dos salidas. Como mínimos. Sentenciado Clement Lenglet por su elevado salario (unos 16 millones de euros), la dirección deportiva del Barça espera ingresar unos 15 millones de euros por Faye.
El Oporto ya intentó el fichaje de Faya hace un mes, pero no aceptó las condiciones econónicas del Barça. Ahora, en Francia, aseguran que el Rennes ofrece 10 millones de euros y un porcentaje de una futura venta del defensa senegalés a otro equipo.
Interés en la Premier
El Barça, de momento, no cede. Quiere más, consciente de que Faye también está en el punto de mira de algunos clubes de la Premier. El Chelsea y el Manchester United, en pleno proceso de renovación, podrían pujar por el jugador del Barça.
Más complicada será la salida de Lenglet. Su salario es un freno para cualquier club. Las dos últimas temporadas fue cedido al Tottenham y al Aston Villa, con un rendimiento mejor en el equipo londinense que en el de Birmingham.