El Camp Nou progresa adecuadamente, pero todavía quedan dos años largos para que las obras estén totalmente terminadas. Entonces será "el mejor campo del mundo", según el presidente del Barça, Joan Laporta. El regreso del primer equipo al estadio se hará realidad mucho antes, a finales de 2024 o principios de 2025, y con una importante limitación del aforo. La próxima temporada, el Camp Nou solo podrá acoger a 60.000 espectadores.
Laporta quería que el Barça pudiera celebrar el 125 aniversario de la fundación del club en el Camp Nou, pero no será posible. Los técnicos desaconsejan que el equipo se traslade entonces. Ahora contempla la vuelta al estadio para mediados de diciembre, pero en la entidad no se descarta que sea en enero de 2025. A partir de entonces las obras se ralentizarán. No habrá tanta libertad de movimientos para los trabajadores.
Obras a corto plazo
Limak, la constructora turca encargada de las obras de reforma del Camp Nou, debe terminar las primeras dos gradas del estadio. Todavía faltan adecuar los pasillos y construir los nuevos lavabos, colocar los nuevos asientos y recuperar las primeras filas. Será un Camp Nou de mínimos.
El Barça volverá a su casa, que seguirá en obras, y pendiente todavía de su gran transformación. Quedarán por levantar los dos anillos de palcos y la tercera grada, totalmente nueva y simétrica.
La nueva cubierta
La parte más compleja y delicada será la colocación de la nueva cubierta que protegerá a todos los espectadores de la lluvia. El futuro Camp Nou tendrá una capacidad máxima de 104.600 espectadores, 20.000 asientos más que el Santiago Bernabéu. También tendrán que colocarse los nuevos marcadores. De momento, Laporta descarta la instalación de un videomarcador de 360 grados como el del Santiago Bernabéu por su alto coste.
El futuro campo del Barça contará con unos 7.000 asientos VIP o de alto standing, unos 2.000 más que el Bernabéu. Algunos palcos serán muy exclusivos, con cómodos sofás en lugar de asientos.
Aparcamientos, ascensores y escaleras mecánicas
Limak también deberá terminar la construcción de 3.000 plazas de parking en los bajos del Camp Nou, 69 ascensores y 78 escaleras mecánicas. El futuro estadio será mucho más cómodo y sostenible. También se eliminarán las actuales barreras para favorecer su integración con los vecinos de Les Corts.
El nuevo Camp Nou, asimismo, tendrá un nuevo museo, más grande que el anterior, mucho más audiovisual e interactivo, con el que el Barça espera ingresar unos 80 millones de euros por temporada. Es decir, casi una cuarta parte de los 340 millones de euros que espera recaudar anualmente por la explotación de su estadio.
En una segunda fase se construirán la nueva tienda del Camp Nou, el nuevo Palau Blaugrana, con capacidad mínima para 15.000 espectadores, el Petit Palau (4.000 asientos), una pista de hielo, oficinas y un hotel.