La ley del silencio en el Barça o cómo frenar las voces críticas contra Laporta
Directivos y ejecutivos que han sido despedidos o han dimitido callan sus discrepancias con el presidente del Barça
22 marzo, 2024 01:39Noticias relacionadas
Joan Laporta tiene un estilo muy presidencialista que ha chocado con directivos y ejecutivos. Más allá de los despidos de altos cargos, muchos han sido las dimisiones que le han presentado al máximo dirigente del FC Barcelona. La primera, y muy sonada, fue la del CEO, Ferran Reverter. Las últimas, las de Maribel Meléndez, máxima ejecutiva, y Eduard Romeu, vicepresidente económico. Oficialmente, sus renuncias se debían a "motivos personales", un eufemismo que tapa las discrepancias con el estilo de Laporta y algunas decisiones trascendentales con un gran impacto económico.
La dimisión de Reverter constató el talante autoritario de Laporta. El entonces CEO del Barça no compartía las condiciones económicas del nuevo contrato de patrocinio de Spotify, convencido de que el club podía sacar más dinero por las mismas partidas. Reverter, además, había diseñado un plan a cuatro o cinco años para rebajar la deuda que saltó por los aires por las urgencias deportivas del primer equipo de fútbol.
La frase de Romeu
Reverter habló poco. No quiso cargar contra Laporta y su salida fue elegante. También lo ha sido la de Eduard Romeu. El vicepresidente económico ha alegado motivos personales y profesionales, silenciando que nunca tuvo la plena confianza de Laporta. Una frase suya le delató: "Ahora te dejo con tu guardia pretoriana", dijo en su despedida. Se refería a los directivos más afines al presidente.
Maribel Meléndez también se fue del Barça, preocupada por la delicada situación del club. Esta semana se ha sabiado que será la nueva directora general de Renta Corporación. Como sus compañeros, se ha marchado del club sin hacer mucho ruido. Igual que Jordi Llauradó, directivo responsable del Espai Barça, que se fue tras anunciarse que Limak sería la constructora encargada de las obras.
Las cláusulas
Laporta, asimismo, ha cortado varas cabezas en algunos departamentos como seguridad y comunicación. Algunas salidas han sido sonadas y desde el club se han justificado de manera muy superficial, hablando de nuevos liderazgos. Los afectados no han despotricado contra el presidente porque en los acuerdos de rescisión se han contemplado cláusulas de silencio, para evitar posibles penalizaciones.
Dos despidos que fueron muy polémicos, y criticados, fueron los de David Barrufet y Xavi Pascual, máximos responsables del Barça de balonmano. Ambos fueron destituidos en 2021 después de que el primer equipo ganar los 61 partidos que disputó y conquistara los siete títulos posibles. Ambos estaban enojados, dolidos por el trato y expresaron su frustración, pero silenciaron muchas cosas. Igual que Mateu Alemany, director de fútbol entre 2021 y 2023.
Llopis, el más combativo
Otra salida que pasó mucho más desapercibda fue la de Jaume Llopis, miembro de la Comisión Espai Barça, tras comunicar Laporta a Messi que no renovaría su contrato. "No ha habido la voluntad real de negociar la continuidad de Messi", manifestó Llopis, muy crítico con la gestión económica de Laporta. Él es la excepción; la mayoría calla, sobre todos quienes todavía cobran parte de las indemnizaciones pactadas.