Villarejo se empeña en enfrentar a Laporta con Rosell tras su reciente acercamiento

El comisario jubilado José Manuel Villarejo ha vuelto a atizar al presidente del FC Barcelona, Joan Laporta. El empresario ha insistido en la filtración de información sobre Sandro Rosell por parte del entorno del máximo mandatario azulgrana. Aun así, ha desmentido que el objetivo de las personas cercanas a Jan fuera incriminar y encarcelar al también exmandamás del club en el marco de la Operación Cataluña.

"Estoy deseando que haya un juicio donde pueda aportar todas y cada una de las pruebas de lo que he dicho y de lo que he ratificado", ha manifestado Villarejo en una entrevista con RAC 1. Semanas después de sus acusaciones contra Laporta, el excomisario ha reafirmado sus palabras en el juzgado de paz de Boadilla del Monte ante el juez y una procuradora que representa al Barça.

El presunto objetivo

Sin embargo, sí que ha matizado el motivo de las filtraciones que había desvelado a principios de octubre: "Lo que he aclarado es que yo nunca dije que la información del entorno de Laporta fuera para meter en prisión a Rosell. Era para colocarlo como elemento clave del independentismo y para que se hicieran actuaciones contra él. Yo no tuve nada que ver, y Rosell lo sabe".

Según las declaraciones de la entrevista recogidas por Europa Press, Villarejo está dispuesto "hasta a hacer una prueba poligráfica" y a un test de drogas, "que no sé si las otras partes, todos los que hablan así de mí, estarían dispuestos a mantenerla. Yo estoy encantado".

Reconciliación

Las polémicas declaraciones llegan tras la imputación de ambos expresidentes de la entidad catalana en el caso Negreira. Recientemente, Laporta y Rosell limaron asperezas en una cena junto con el también acusado Josep Maria Bartomeu, Joan Gaspart y Enric Reyna.

Laporta, más reticente con el encuentro, accedió a la petición de Gaspart en la pasada asamblea de socios compromisarios. El propio Reyna justificó en una entrevista con el programa Què t'hi jugues de la Cadena SER que la cena en el hotel Majestic tenía por objetivo "ir lo más unidos posibles y hacer piña. En estos momentos hay una campaña en toda España contra el Barça. Cualquier cosa que se publica todo el mundo se la cree y la magnifica".