Muy importante debía ser la escapada de Joan Laporta a Qatar como para que, este pasado fin de semana, el presidente del FC Barcelona optase por dejar vacío su lugar en el palco del Palau Blaugrana. También para saltarse la Final Four de la Champions League de balonmano, con un Barça que fue apeado en semifinales frente al equipo que acabó siendo campeón, el Magdeburgo. Un partido que se resolvió en el último suspiro y estuvo lleno de emoción, igual que los dos encuentros de la final de ACB entre FC Barcelona y Real Madrid, con finales tan ajustados como polémicos.
La emoción deportiva, sin embargo, parece que Laporta sólo la siente con el primer equipo de fútbol. Ahí sí que se le eriza la piel, sin faltar prácticamente nunca al palco del Camp Nou. También se divierte cada vez más con el Barça Femenino, ahora que lleva años erigiéndose como el mejor equipo de Europa. O al menos, el más constante.
Si bien es cierto que el fútbol es la gallina de los huevos de oro y sus ingresos mantienen al resto de secciones, es cuanto menos criticable que Laporta, con la temporada 2022-23 finalizada, haya abandonado a las secciones en plena lucha por los títulos. El 'més que un club' y el valor añadido que aportan las distintas disciplinas deportivas, un argumento tan defendido y encumbrado por su junta, no ha sido suficiente para que dé la cara y apoye a sus equipos cuando más lo necesitan.
Las secciones del FC Barcelona, un valor añadido
Esa ausencia de este fin de semana, combinada con el inesperado viaje a Qatar, le está valiendo las críticas de buena parte de los socios y del barcelonismo. Visto con perspectiva, resulta lógico. Más aún cuando la entidad azulgrana está a un paso de conseguir un hito histórico; el de hacer un pleno de Ligas con las seis secciones profesionales. Nunca antes se ha logrado. Y Laporta está dispuesto a perdérselo. De momento, ya hay cuatro secciones que han levantado el título liguero: la de fútbol, el masculino y el femenino, la de hockey patines y la de balonmano. Mientras que las otras dos, el basket y el fútbol sala, lo tienen todo a favor para convertirse también en campeones. Ya están en la final de sus respectivos campeonatos, y se encuentran con ventaja ante sus respectivos oponentes.
Laporta, en vez de acudir al palco para animar y promover semejante logro histórico, tenía otros planes este fin de semana. Puede que quisiera ahorrarse abucheos del público en el Palau, claramente a favor de la continuidad de Mirotic. Aunque quizá habría venido bien para su imagen que apoyase en primera persona a los equipos culés de baloncesto y balonmano, en un momento muy delicado a nivel económico.
Un 15% menos de presupuesto en las secciones
Si ponemos la lupa en la reducción de presupuesto en el global de las secciones, en Culemanía ya informamos que el objetivo es pasar de los 108 millones de euros actuales a un gasto de 90 millones, alrededor de un 15% menos. Resulta necesario pasar la tijera, entre otras cosas, porque los equipos culés que compiten en los distintos deportes muestran números rojos año tras año. No en vano el club asumió unas pérdidas récord de 48,1 millones la última temporada en sus secciones profesionales --baloncesto, balonmano, fútbol sala y hockey--, sumando además sus conjuntos amateurs.
No es excusa, sin embargo, para que Laporta se ausente del palco en encuentros tan trascendentales, y en cambio apueste por compromisos personales que nada tienen que ver con el deporte. Si algo distingue al FC Barcelona del resto de grandes entidades deportivas, es el valor añadido de sus secciones.
Sin Barça TV, las secciones pierden cobertura
A los recortes en las secciones, paralelamente, hay que unir la drástica reducción de cobertura mediática que recibirán a partir del 30 de junio, cuando cierre Barça TV. Culemanía entrevistó días atrás a Ernest Méndez, presidente del Comité de Empresa del canal. El trabajador culé reflejó la esencia, profesionalidad y buena imagen que el Barça perderá cuando cesen las emisiones. "La imagen que das al exterior es patrimonio. Ahora mismo la sección del Femenino está de moda, ha crecido muchísimo... Pero en la Liga, fuera de casa, en las ruedas de prensa sólo está Barça TV. No en todos, pero sí en la mayoría", explicó a este medio.
"Entonces, la imagen que das es profesional. El espectador ve una rueda de prensa, aunque no haya más periodistas en la sala. Y ahora no lo vas a tener cuando juegues fuera. Ya ni qué decir del hockey, del fútbol sala o del básquet, que van a tener menos cobertura...", manifestó Ernest Méndez. Sin duda, pasar la tijera conlleva riesgos. El gran reto es saber cuándo hay que parar de cortar. O, al menos, si entre tijeretazo y tijeretazo se puede pasar alguna puntada con hilo. Acciones que dejen de lado las palabras y, en parte, signifiquen una muestra de cariño. Con las secciones, este fin de semana Laporta dejó pasar una oportunidad de oro. Y ya no volverá.