El FC Barcelona se ha propuesto como objetivo cerrar una venta urgente antes del 30 de junio de este año. No se trata de una obligación para cuadrar las cuentas del ejercicio 2022-23, ya que este curso cerrará con beneficios gracias a las palancas de Laporta. Sin embargo, se trata de una necesidad muy aconsejable para poder empezar el mercado de fichajes con garantías por parte del control económico de la Liga.
El Barça tiene un problema de tesorería y unos balances ordinarios que todavía son negativos. Sin palancas, habría pérdidas este curso. Sin palancas, lo normal sería tener pérdidas también durante la temporada 2023-24. El plan de viabilidad presentado por el club, que todavía espera la aprobación de la Liga, prevé tapar el agujero actual de 220 millones de euros para, así, poder afrontar el mercado de fichajes bajo la norma 1-1, sin estar sometidos a la regla del 40%.
Inscripciones urgentes y candidatos al traspaso
En estos momentos, la prioridad de Mateu Alemany es inscribir a los jugadores que ya forman parte de la plantilla actual y fueron renovados recientemente. Araujo, Gavi, Sergi Roberto, Marcos Alonso e Iñaki Peña. Todos ellos, pese a estar contractualmente renovados por el Barça, no están inscritos por la Liga para la temporada que viene.
Cuánto antes solucione el Barça la situación de pérdidas ordinarias en que está inmerso, antes podrá inscribir a estos jugadores bajo la norma 1-1. Por este motivo, el deseo del club es cerrar una buena venta antes del 30 de junio y, así, poder inscribirlos a todos en cuanto empiece el mes de julio, con el mercado de inscripciones ya abierto de cara a la temporada 2023-24.
Los principales candidatos a generar un traspaso importante para las arcas del club dentro de la plantilla actual son los siguientes: Frank Kessié, Ansu Fati, Ferran Torres y Raphinha. Obviamente, hay más salidas contempladas sobre jugadores que vuelven de cesión como Lenglet, Umtiti, Dest, Trincao, Nico y Collado. El único cedido que podría quedarse en el primer equipo a día de hoy es Abde. En cuanto a Pablo Torre, también está decidido que se vaya cedido.
Plan de viabilidad
El plan de viabilidad del Barça consiste en erradicar los 220 millones de pérdidas actuales de la siguiente manera: por un lado, con recortes salariales y generación de nuevos ingresos por un valor final de 116 millones. Del otro lado, con la venta de jugadores por valor superior a 100 millones de euros. Cuánto más margen obtenga el club, más oxígeno y posibilidades tendrá con las nuevas inscripciones.
Además de las cinco renovaciones citadas, el Barça también trabaja en otras dos prolongaciones de contrato: las de Alejandro Balde y Ousmane Dembelé. Estos casos no son tan urgentes como los anteriores porque ambos tienen todavía un año más de contrato, hasta 2024. Sin embargo, en el supuesto del lateral zurdo, ocurre el mismo problema que este año con Gavi, de momento sigue con ficha del Barça B. El club espera poder solventar esta situación lo antes posible.
Los siete fichajes que pide Xavi
Más allá del acumulado de renovaciones, el Barça también espera firmar numerosos nuevos fichajes para completar la plantilla equilibrada y competitiva que anhela el entrenador, Xavi Hernández. El técnico quiere hasta siete nuevas incorporaciones.
Tras confirmarse la marcha de Busquets, Xavi tiene claro que su prioridad es reforzar la posición del mediocentro posicional. Joshua Kimmich y Martín Zubimendi son, a día de hoy, las principales obsesiones del egarense. Estamos hablando de dos operaciones muy costosas, en torno a los 60 millones de euros. Para poder afrontarlas, el nivel de ventas del Barça debería ser todavía mayor al antes comentado.
Los otros dos grandes fichajes que espera Xavi son los de Leo Messi e Ilkay Gundogan. Ambos podrían tener un rol similar en el equipo, el de interiores ofensivos que generan desequilibrio. Gundogan es más centrocampista, brillante, técnico y más sacrificado por el equipo en tareas defensivas. Además, va loco por venir al Barça. Messi ha sido el mejor jugador del mundo durante muchos años. Es más desequilibrante, aunque ya no tanto como antes, un magnífico asistente y tiene mucho más gol que Gundogan, pero no sumará tanto en defensa. Xavi espera poder entrenar a ambos pero, al menos, vendrá uno. Ambos llegarían con la carta de libertad, a coste cero.
Las siguientes prioridades de Xavi corresponden a la parcela ofensiva. El equipo necesita un extremo izquierdo que genere desequilibrios y uno contra uno, pero que también aporte sacrificio defensivo. Yannick Carrasco es el elegido, cuyo coste rondaría los 15 millones de euros. Por otra parte, el técnico aspira a la llegada de un delantero goleador que pueda ser suplente y recambio de Lewandowski. Vitor Roque gusta más que nadie por condiciones y edad, pero no costará menos de 40 millones. Más baratos podrían salir Aubameyang y Marcus Thuram.
Por último, en tareas defensivas, el cuerpo técnico ha pedido un lateral derecho y un central de perfil zurdo. La posición que este año ha ocupado normalmente Koundé, tiene tres finalistas: Juan Foyth, Joao Cancelo y Benjamin Pavard. En cuanto al central zurdo, el elegido es Iñigo Martínez, cuyo contrato ya está acordado con el club. Llega con la carta de libertad y tiene una cláusula por la que se puede marchar gratis si el Barça no genera espacio salarial suficiente para inscribirlo en verano.
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