No hay semana tranquila en el Barça. Si el pasado 2 de mayo, tras ganar al Osasunala salida de Mateu Alemany estaba confirmada, ahora el ejecutivo balear dice se queda y quien hace las maletas es el secretario técnico, Jordi Cruyff. Puede que la decisión del hijo de Johan haya influenciado a Mateu a la hora de recular, aunque diversas fuentes lo niegan: si hay un motivo de peso en el arrepentimiento del director de fútbol es que, en definitiva, tiene ganas de seguir adelante con lo que ha construido; con un proyecto casi personal que considera suyo, después de haberlo iniciado dos años atrás. Un proyecto que, finalmente, antepone al dinero. 

Según ha podido saber Culemaníael Aston Villa iba a triplicar el salario de la mano derecha de Joan Laporta. Si bien el Barça le pagaba una cifra próxima al millón de euros anual --algunas fuentes hablan de 1,4 millones; otras hablan de un poco menos sin contar incentivos por objetivos--, el club de Birmingham ofecía a Mateu tres veces más: de 3 a 4 millones de euros anuales. Sin embargo, y aunque la diferencia del fijo es considerable, otras fuentes consideran que con los variables que propone el Barça la diferencia no es tan importante. 

Un movimiento que se espera de Leo Messi

Sobre el papel, sin embargo, Mateu ha priorizado la implicación personal del proyecto azulgrana, un trabajo que ha ido elaborando durante los dos últimos años y que, a día de hoy, considera inacabado. Nunca quiso dejar tirado al club y mucho menos a la directiva encabezada por Joan Laporta, que confió en él desde el primer momento y con quien mantiene una buena relación, a pesar de que puedan tener sus diferencias en ocasiones.

Mateu Alemany y Jordi Cruyff, esperando un vuelo en el aeropuerto para cerrar un fichaje / REDES

Mateu Alemany y Jordi Cruyff, esperando un vuelo en el aeropuerto para cerrar un fichaje / REDES

Ya habrá tiempo para las aventuras en el extranjero. Al igual que se espera que haga Leo Messi en cuestión de semanas, si la Liga da el OK al plan de viabilidad económica del Barça, la cuestión es que Mateu Alemany ha renunciado a una oferta más que tentadora por seguir en el FC Barcelona. Si continuará tan sólo hasta el 30 de junio de 2024 o alargará su contrato más allá de esa fecha, aún se desconoce.

Hay cosas que el dinero no puede comprar

Los vínculos que mantiene con Unai Emery y Damià Vidagany, las mentes pensantes en la estructura deportiva y organizativa del Aston Villa, no han sido suficientes para moverle del Barça. A partir de ahora, el mallorquín pasará a liderar una nueva parcela deportiva con la inclusión de Deco, quien ya se ha reunido en diversas ocasiones con la cúpula directiva del Barça para ocupar el puesto de Jordi Cruyff una vez finalice la temporada 2022-23.

Joan Laporta y Mateu Alemany, durante una rueda de prensa del Barça en el Auditori 1899 / FCB

Joan Laporta y Mateu Alemany, durante una rueda de prensa del Barça en el Auditori 1899 / FCB

Mateu no tendrá que cambiar de idioma, sufrir las inclemencias de la meteorología británica ni engullir fish and chips en detrimento de la gastronomía catalana. Tampoco deberá comerse por segunda vez en su carrera el marrón de Philippe Coutinho. Al brasileño, que salió del Barça por la puerta de atrás, también se lo quieren quitar de encima en el Aston Villa y no saben cómo hacerlo. Al ejecutivo culé le costó lo suyo, y no tendrá que volver a pasar por el mismo infierno.

Para el Barça, la lectura es positiva. Para Mateu, también. Cierto es que renuncia a más dinero por seguir en el Barça, pero a cambio gozará de una estabilidad que le habría costado tiempo y esfuerzo labrarse en Birmingham, al mando de un club mucho más anónimo y menos atractivo para los futbolistas que el FC Barcelona. Hay cosas que el dinero no puede comprar, y una de ellas es el reconocimiento que le otorga su labor en el Barça. Mateu no tendrá mucha tranquilidad en el Camp Nou, pero podrá terminar un proyecto que lleva su sello personal, junto al de Laporta y Xavi. Un tridente bien avenido que manda un mensaje claro: les va la marcha.