España ha conseguido su cuarta Eurocopa. La Roja ya es la selección europea que más veces se ha alzado con el torneo. Una selección española plagada de talento joven, con Lamine Yamal y Nico Williams a la cabeza, ha desplegado el mejor fútbol de la competición y se ha coronado como campeona de Europa.
La otra cara de la moneda la ha protagonizado Inglaterra. En especial, su jugador estrella, Jude Bellingham. Tras la derrota de los 'three lions' ante España (2-1) en Berlín, Bellingham se ha retirado del campo visiblemente cabreado, propinando una patada a la nevera de las aguas de camino al vestuario. Es la segunda final de la Eurocopa que pierde con el combinado inglés.
Después de lo sucedido anoche, en el que la selección española le ha arrebatado el título europeo, los galardones individuales de la Euro y se han desvanecido sus aspiraciones a ganar el Balón de Oro, Jude Bellingham ha tenido esta polémica reacción ante la derrota sufrida ante los de Luis de la Fuente. El futbolista del Real Madrid sucumbió ante el futbolista culé llamado a marcar una era en el fútbol, Lamine Yamal.
Segundo momento polémico en la Eurocopa
En los octavos de final, Jude Bellingham anotó un golazo de chilena en el minuto 94 para empatar el partido ante Eslovaquia. En la celebración de dicho tanto, Bellingham se señalaba sus partes nobles y apuntó el dedo a un sector de la grada, en un acto que, en palabras de la UEFA, "violó las reglas básicas de conducta decente". El de Birmingham fue sancionado con 30.000 euros, pero en lo deportivo, solo cumplirá el partido de castigo en caso de reincidir en su comportamiento durante los siguientes 365 días.
Esta ha podido ser la gota que colma el vaso. A pesar de no ser un gesto de una magnitud similar al que hizo ante Eslovaquia, es una mala conducta por parte del centrocampista inglés.