Locura absoluta en el Parque de Los Príncipes. El Paris Saint-Germain, que tuvo pie y medio fuera de la siguiente ronda de Champions League, logró empatar in extremis frente al Newcastle gracias a un gol cuanto menos polémico. ¿El motivo? Un penalti por mano que llegó justo después de un rebote, y que teniendo en cuenta el reglamento --y el modus operandi habitual de los árbitros para estas situaciones-- no debería haberse pitado.
Fue Szymon Marciniak quien, tras revisar la acción en el VAR en el minuto 96, señaló una pena máxima incomprensible. Kylian Mbappé fue el ejecutor, no sin suspense, para igualar de esta forma el tanto inicial de Alexander Isak y permitir que el PSG se juegue el pase a octavos en la última jornada contra el Borussia Dortmund, ya clasificado.
Quejas y más quejas en Inglaterra
En Inglaterra están corriendo ríos de tinta tras el polémico penalti, y no es para menos. "Para ser honesto todavía lo estoy asimilando. No tuvimos suerte al final, creo que no fue penalti... Lo que la repetición no enseña es la velocidad con la que produce la acción. Golpea primero en el cuerpo, esa es la clave".
"Si golpeara primero en el brazo seguiría pensando que no es penalti, pero quizás podría llevar razón, pero cuando toca primero en una parte de su cuerpo y luego sus manos están abajo, no es penalti. No nos debería haber costado el partido", se quejó Eddie Howe, entrenador del Newcastle.
Luis Enrique desvía la atención
Luis Enrique, en cambio, echó balones fuera al ser preguntado por la acción. “No he visto ninguna jugada. No me dedico a mirar el VAR. Me dedico a intentar mejorar al equipo. Con eso ya tengo bastante”, señaló. Y destacó la buena actitud del equipo galo a la hora de buscar el empate frente al conjunto inglés.
“Sin ninguna duda hemos merecido el empate. Creo que hemos jugado un partido muy completo, hemos merecido ganar el partido sin ninguna duda. Hemos sido mejores que el Newcastle. El resultado no merece lo que ha ocurrido en el terreno. El fútbol es así. No premia al que hace más ocasiones. Premia al que hace más goles. Y hemos empatado”, remarcó el técnico asturiano.
Ousmane Dembelé, por cierto, fue quien intentó el pase que rebotó en el cuerpo y la mano de Livramento, jugador del Newcastle, en la polémica jugada del penalti a favor del cuadro parisino. Hace unos días, el exjugador del Barça se estrenó a nivel goleador con el PSG, y poco a poco va mejorando sus prestaciones gracias a la confianza de Luis Enrique, quien le sigue dando una oportunidad tras otra.