La época de Luis Enrique con el FC Barcelona fue bastante exitosa. De más a menos, pero dejando muchos títulos y momentos importantes en la historia del club azulgrana. También fue una etapa en la que se dieron fichajes muy contrastantes, debido a que varios de esos jugadores nunca llegaron a cuajar en el fútbol azulgrana. Uno de esos casos corresponde a André Gomes, que fue incorporado al elenco culé como un perfil potencial al Balón de Oro.
Al menos así lo llegaron a establecer en la anterior directiva del Barça, debido a que incorporaron en su contrato una cláusula en la que acordaron un premio especial de un máximo de 15 millones de euros en caso de ganar el Balón de Oro. Fue una noticia que tomó por sorpresa al barcelonismo, teniendo en cuenta que el centrocampista portugués no apuntaba a ese escalón tan alto. Aunque sí generaba cierta expectativa para convertirse en un jugador importante para Luis Enrique, debido a su notable rendimiento con el Valencia.
Sin embargo, el resultado fue totalmente diferente. André Gomes tuvo una etapa muy decepcionante como futbolista azulgrana, en especial porque nunca pudo asentarse en el once titular y tampoco consiguió ser un complemento de nivel en la plantilla. La imagen de sus años en el Valencia no pudieron replicarse en su paso por el Camp Nou, por lo que decidió trasladarse hasta la Premier League, concretamente a un Everton que pagó 25 millones de euros al Barça.
Su drama en la Premier
Con el Everton, el centrocampista consiguió recuperar sensaciones. No al nivel de sus primeros años en la Liga, pero sí con la capacidad para ser un jugador útil en su equipo. A pesar de ser titular indiscutible en varias temporadas, la mala suerte persiguió a André Gomes en forma de lesión. La fractura de tobillo que sufrió en 2019 cortó su buen momento en la competición inglesa, siendo una situación que explica su actual drama.
Tras estar muchos meses fuera de los terrenos de juego, el Everton decidió ceder a André Gomes al Lille de Francia. Tuvo una buena cuota de minutos y se esperaba que al volver el pasado verano pudiera recuperar su presencia en el equipo; no obstante, el actual entrenador, Sean Dyche, no lo tiene dentro de sus planes. El centrocampista no ha jugado un solo partido desde el pasado mes de mayo, lo que supone un contexto realmente complicado.
Ni en la Liga --con el Barça-- ni en la Premier League ha conseguido mostrar esa imagen que tanto llegó a asombrar en el panorama internacional. Un fichaje que llegó a conseguir una cláusula de Balón de Oro y que fue entrenado por Luis Enrique, pero que al final no ha logrado cumplir con esas expectativas.