Un 16 de octubre de 2004, la historia del fútbol empezó a cambiar para siempre. Aquella noche, un jovencísimo futbolista de 17 años disputó sus primeros minutos como profesional. No era un cualquiera. Era Leo Messi. Se trataba de la primera vez que iba convocado con el primer equipo del FC Barcelona en partido oficial, y nada menos que en un derbi de Liga contra el RCD Espanyol en Montjuïc.
A falta de ocho minutos para finalizar el compromiso, Frank Rijkaard dispuso la salida de Deco, autor del gol del triunfo, y la entrada de Lionel Andrés Messi con el dorsal 30 a la espalda. Tenía tan sólo 17 años, y en esos ocho minutos ya dejó algunas muestras de todo lo que estaba por venir.
Una huella imborrable
En total, Messi disputó 778 partidos con FC Barcelona y ganó 35 títulos en 19 temporadas. Marcó 672 goles, repartió 305 asistencias y se convirtió en el futbolista más importante en toda la historia de la institución. También del mundo.
Actualmente Messi lidera la estadística histórica de Barça en partidos jugados, goles marcados, asistencias repartidas y títulos conquistados. Es el futbolista que más hat-tricks ha cosechado, y también quien más veces se ha consagrado como Pichichi de la Liga con la camiseta azulgrana.
Despedida pendiente
Aunque fue obligado a marcharse del FC Barcelona por la puerta de atrás, está previsto que en algún momento vuelva para despedirse del barcelonismo como merece el jugador más importante de la historia culé. Presumiblemente, cuando el Camp Nou ya esté remodelado a partir de finales de 2024.