Santi Mina, condenado a cuatro años de prisión por delito sexual
El tribunal también ha impuesto al futbolista una orden de alejamiento de la víctima por un período de 12 años y una indemnización de 50.000 euros
4 mayo, 2022 14:13La Audiencia Provincial de Almería ha condenado a cuatro años de prisión a Santi Mina, el futbolista del Celta de Vigo, acusado de abusar sexualmente de una mujer la madrugada del 16 de junio de 2017 en Mojácar (Almería). El tribunal presidido por la magistrada Társila Martínez le ha impuesto también una orden de alejamiento de 50 metros por 12 años y el pago de una indemnización de 50.000 euros.
Si bien la sentencia absuelve al deportista del delito de agresión sexual por el que el fiscal y la acusación particular pedían una pena de ocho y nueve años de prisión, respectivamente. Asimismo, el tribunal de la Sección Tercera exime también de responsabilidades penales al futbolista David Goldar, a quien el Ministerio Público sentó en el banquillo de los acusado como “cooperador necesario" en la agresión.
La defensa de Mina recurrirá la sentencia
En un comunicado a EFE, la defensa de Mina ha anunciado que presentará un recurso de apelación a la sentencia. El equipo de letrados del futbolista considera que la resolución no se encuentra ajustada a derecho al presentar importantes errores en la valoración de las pruebas practicadas y por tanto de los hechos acaecidos.
El juicio quedó visto para sentencia después de que el Ministerio Público elevase a definitivas sus conclusiones, el pasado 31 de marzo. Desde el 28 del mismo mes, los médicos y psicólogos del Instituto de Medicina Legal de Almería que exploraron psicológica y físicamente a la denunciante fueron a declarar ante el tribunal. También lo hicieron los agentes de la Guardia Civil que detuvieron al delantero.
El juicio
De acuerdo a los exámenes practicados, la conclusión de los facultativos es que la víctima presentaba lesiones compatibles con la agresión relatada. Además también se hallaron restos biológicos de Mina en su cuerpo. La especialista encargada de realizar el seguimiento psicológico a la joven declaró que el trastorno de estrés postraumático que tiene todavía hoy diagnosticado "está directamente relacionado" con los hechos enjuiciados.
En la vista también compareció uno de los detectives contratado por la defensa del futbolista, que investigó durante el verano de 2019 --dos años después de que ocurrieran los hechos de los que se le acusa-- a la joven. El hombre aseguró que durante el período que duró el espionaje a la denunciante, esta "tenía una relación sentimental, una vida social normal, sin problema para relacionarse con extraños".