Violeta Mangriñán orgullosa de estar en los huesos

El cuerpo de la televisiva, Violeta Mangriñán, ha experimentado un cambio de lo más radical, y que preocupa a todos sus seguidores. Si antes de poner rumbo a Honduras tenía curvas, ahora, la valenciana se ha quedado completamente delgada.

Un cuerpo al que ella misma se refirió, a través de su canal de Mtmad, como “chasis”. Y es que la pareja de Fabio pesa, nada más y nada menos que 47 kilos y medio. Algo de lo que ella se siente muy orgullosa.

“El hueso es tendencia”

Aprovechando el tirón mediático que le ha dado su paso por la isla más famosa de la televisión, Violeta Mangriñán se ha acercado hasta la Madrid Fashion Week, como si de una ‘IT girl’ se tratara. La televisiva ha decidido hacer acto de presencia al desfile de la diseñadora Dolores Cortés y allí ha dado unas declaraciones de lo más incendiarias.

“Me veo estupenda. Antes de estar en el mundo de la tele, mi jefa siempre me decía: “el hueso es tendencia”. Esto no quiere decir que quiera fomentar que la gente no tenga que comer, pero yo me veo estupenda. Aunque la gente me diga que estoy horrible y que solo tengo cabeza”. Estas han sido las palabras que la televisiva ha soltado tras ser preguntada por cómo se ve físicamente. Un cuerpo del que Violeta está tan orgullosa que no ha podido evitar decir: “Este verano tengo más ganas que nunca de ponerme bikini”.

Preocupada por su relación con Fabio

A su paso por la pasarela de moda, la extronista de Mujeres y Hombres y Viceversa también ha aprovechado para confesarse acerca de su romance con Fabio. Y es que la joven valenciana abandonó de la noche a la mañana el reality, debido a sus problemas con la vesícula.

“Está toda la gente como queriéndolo gafar y estoy protegiéndome con un huevo de oro”, ha dicho Violeta sobre su relación con Fabio. Y es que muchos son los que piensan que no van a durar ni 24 horas seguidas, cuando el argentino regrese de Honduras. Sin embargo ella se mantiene optimista y dice que "sí". Es más, ya tiene muchos planes para hacer con su chico: “La idea es irnos de vacaciones en septiembre a Nueva York y a Argentina a conocer a su familia”. ¿Llegarán a cruzar el charco?