Los 'triunfitos', volcados por completo con la familia de Àlex Casademunt

La trágica muerte de Àlex Casademunt impactó de lleno en el corazón de los triunfitos de la primera edición. Todos ellos mostraron su desolación en sus respectivas redes sociales, pero algunos incluso pudieron despejar sus agendas para viajar hasta Barcelona y despedirse de su amigo como corresponde.

Chenoa, Natalia, Manu Tenorio y David Bustamante cogieron juntos un AVE en la estación de Atocha, y llegaron a la capital catalana junto a Nuria Fergó. Los cinco fueron directos a la casa de los padres de su amigo, en Argentona (Barcelona), --regalo de su hijo a su salida de Operación Triunfo-- donde se dejaron ver completamente cabizbajos y muy pendientes en todo momento de la familia de Àlex.

La gran familia de 'OT'

Ninguno de los triunfitos ha querido perderse la despedida de Àlex Casademunt, pero la situación era complicada. Sin embargo, cinco de ellos han podido viajar hasta Barcelona para dar personalmente el pésame a la familia del cantante. Chenoa, muy afectada, no se ha separado ni un solo momento de su gran amiga Natalia, a la que veíamos también volcada con todos sus compañeros.

Los 'triunfitos' Manu Tenorio y Nuria Fergó en casa de los padres de Àlex Casademunt / EP

David Bustamante y Manu Tenorio se han mostrado muy tristes por la noticia, y no ha hecho ningún comentario al respecto. A su llegada a la casa de la familia del cantante, el sevillano se ha dejado ver apoyado por su amiga Nuria Fergó, viéndose a ambos muy tocados emocionalmente.

"Todo el mundo le quiere"

Pese a estar completamente destrozados, los cantantes han demostrado tener una relación de lo más cercana tanto con los progenitores como con los hermanos del carismático artista. Una imagen que plasma a la perfección que, 20 años después, todos ellos siguen siendo una gran familia.

Bustamante, Manu y Nuria se han quedado en Barcelona para asistir al funeral de Àlex, a la espera de que finalice la autopsia del cuerpo. Pero Chenoa y Natalia, con compromisos ineludibles, se vieron obligadas a regresar a última hora de la noche a Madrid. Visiblemente abatidas, las amigas confesaban estar "cansadas, agotadas" y sin ganas de hablar. La mallorquina, sin fuerza ni voz, no pudo mediar palabra frente a los medios, pero la benjamina de la edición sí pudo transmitir sobre su dolorosa pérdida que "lo bonito es que todo el mundo le quiere, que es lo que hemos visto. Nos quedamos con eso".