El nuevo retoque estético de Ortega Cano: reaparece con el rostro amoratado

En medio de la gran polémica familiar que está viviendo con su mujer Ana María Aldón, José Ortega Cano ha decidido ignorar el conflicto y someterse a una intervención estética para mejorar su imagen, ahora que el torero va a ser el nuevo vocal del Centro de Asuntos Taurinos de la Comunidad de Madrid.

Un retoque que llega justo después de un fin de semana de lo más turbulento en el que la colaboradora de Viva la vida ha confesado estar dolida por las reacciones que ha generado el confesar que su matrimonio atravesaba una crisis. Al parecer, se habría sometido a una operación de injerto de cejas en una conocida clínica.

Nuevo aspecto

En compañía de uno de sus grandes apoyos, su cuñado Aniceto, el diestro ha acudido esta mañana, alrededor de las 11, a una conocida clínica especializada en este tipo de intervenciones. Después de cinco horas, Ortega Cano ha salido con el rostro muy hinchado, los ojos amoratados y apósitos en la parte trasera de las orejas y el cuello. 

Tal y como ha avanzado en exclusiva el diario La Razón, el diestro habría utilizado una técnica que consiste en repoblar de vellos las cejas que, con el paso del tiempo y la edad, pierde parte de su densidad. No hay más que ver el rostro del padre de Gloria Camila, ya que apenas se le ve pelo en esa zona. 

¿Cambio por su mujer?

Tal y como han comentado en Sálvame esta misma tarde, le podrían haber quitado el pelo de detrás de la nuca para ponérselo en las cejas, ya que presenta un grosor y un tamaño similar al de la parte superior de los ojos; es por eso que llevaba los apósitos en esa zona. Según desvela la misma publicación, Ortega Cano habría desembolsado 2.500 euros por su implante de cejas. 

Una información que él mismo se ha negado a dar ni a comentar, al igual que todo lo relacionado con la polémica que se encuentra viviendo su familia. El torero simplemente se ha limitado a sonreír cuando le han comentado que su intención con esta operación es ponerse más guapo. ¿Por él mismo o para su mujer Ana María?