Enrique Ponce grita a los cuatro vientos su amor por Ana Soria

Lo suyo es una relación sólida. Contra todo pronóstico, Enrique Ponce y Ana Soria han demostrado que su noviazgo va viento en popa y a toda vela. Pese a la gran diferencia de años que existe entre ambos --nada más y nada menos que 27-- la pareja se encuentra en su mejor.

Y es que para este par de tortolitos cada día del año parece que es San Valentín. Prueba de ello es la última instantánea que ha compartido Ponce en sus redes sociales.

Un amor adolescente

No cabe duda de que el matador está que bebe los vientos por la joven estudiante de Derecho. A través de un stories de Instagram, el ex de Paloma Cuevas ha difundido una fotografía de su chica mientras se atusa su larga melena rubia. Por si fuera poca muestra de amor, Enrique, a sus casi 50 años, le ha dedicado una bonita frase, sacada desde lo más profundo de su corazón. 

La fotografia en cuestión /INSTAGRAM

"Instantes en los que detienes el tiempo", ha escrito junto a dos corazones que acompañan el nombre de la joven almeriense. Sin embargo, Ana no es quien se ha llevado todo el protagonismo de la foto. En la imagen también se puede ver a Ney. El perro de la pareja parece pasárselo en grande jugando en el suelo con un trozo papel. Eso sí, siempre bajo la atenta mirada de su dueña.

Ponce, enamorado de una joven temeraria

Un hecho por el cual no nos extraña que el torero caiga rendido ante semejante estampa, digna de un poema de esos del amor cortés. Sin embargo, no todo es de color rosa en la vida de ambos. La pareja en pocos días se sentará en el banquillo de los acusados y no precisamente para firmar el divorcio que separa a Enrique de Paloma.

La joven de 22 años deberá comparecer ante el juez después de que la Guardia Civil la pillase al frente de un volante sin tener carné de conducir. Todo ello mientras el diestro iba de acompañante. Un hecho por el cual se puede enfrentar a una pena de 3 a 6 meses de cárcel, una multa que va desde los 12.000 hasta los 24.000 euros, o a 91 horas de trabajo social.