Semanas después de superar la grave crisis que a punto estuvo de terminar con sus seis años de amor, Rocío Flores y Manuel Bedmar vuelven a estar en el punto de mira. Lo hacen después que la revista Lecturas sacase este miércoles en exclusiva una entrevista con Laura Gutiérrez Mérida, la amante del empresario.
La joven ha dejado al descubierto cómo fue su relación y cuáles fueron sus principales miedos mientras duró. De hecho, además de despejar todas las dudas al afirmar de forma contundente que Manuel le fue infiel a Rocío Flores con ella, revela que ambos se estuvieron viendo durante más de seis meses.
Una infidelidad
Lejos de dejarlo aquí, Gutiérrez también explicó cómo era la manera de proceder de Bedmar con su novia. Y es que, el testimonio de la andaluza, rompe, por completo, con la imagen que pretende cultivar el emprendedor: “Manuel quería que mintiera y le dijera a Rocío que no habíamos tenido nada”, confiesa.
Por si fuera poco, Gutiérrez se atrevió a desvelar cómo eran sus encuentros sexuales y dónde daban rienda suelta a pasión. Y es que la pareja rendía tributo a su amor en la misma cama en la que yacía Manuel cada noche con Rocío. Algo muy poco higiénico, puesto que según la amante, tenía miedo de que algún día la nieta de la Jurado encontrase un pelo suyo.
Manuel guarda silencio
Por si fuera poco, horas después de que esta entrevista viera la luz, Laura se ponía en contacto con Sálvame para aportar todas las pruebas que acreditan su idilio: unos audios de WhatsApp que no han dejado indiferente a nadie. Preguntado por todo ello, el protagonista de esta infidelidad hace oídos sordos.
El yerno de Antonio David Flores pasa palabra y guarda silencio. Como si nada hubiera pasado, esta mañana el veinteañero abandonaba la casa de la hija de Rociíto para irse a trabajar. Por el momento, se desconoce si el testimonio de la joven habrá causado una nueva crisis en la pareja, o si, por lo menos, la influencer y colaboradora de AR le habrá pedido explicaciones.