No han pasado ni 48 horas desde que España conociera que será Chanel quien representará al país el próximo 12 de mayo en Eurovisión para que la artista ya haya anunciado que se retira de Twitter por el odio recibido. No obstante, a fecha de hoy su perfil todavía sigue abierto, algo que hace pensar que tan solo lo ha silenciado.

"Empecé mirando un poco de redes, pero desconecté porque estaban ardiendo y emocionalmente no me venía bien, había mucho 'hate' aunque también mucho amor", ha confesado a los periodistas. Y es que la final del Benidorm Fest no estuvo exenta de polémica.

La decisión del jurado 

La puntuación del jurado catapultó a la joven cubana, --afincada en Olesa de Montserrat--, a lo más alto del casillero. Un reconocimiento totalmente contrario al de la opinión popular, partidaria de Rigoberta Bandini o Tanxungueiras que trasladó su descontento con el veredicto final a Twitter.

Prueba de ello, la etiqueta “tongazo” se convertía en tendencia nacional minutos después de que la cantante alzase el micrófono de bronce. De hecho, en las últimas horas, Chanel ha sido víctima de todo tipo de críticas e, incluso, insultos.

Salud mental 

“Estamos hablando de algo muy serio como la salud mental. Esto no nos viene bien a nadie", ha declarado la artista en rueda de prensa. “Detrás de una pantalla, detrás de una canción, de un vestuario, de una puesta en escena hay personas y tenemos sentimientos, hay que tener cuidado con la salud mental y emocional", ha continuado.

Con todo, la joven de 31 años no ha dudado en agradecer las muestras de apoyo recibidas por parte de sus compañeros, sobre todo, por parte de Rigoberta Bandini. "Quiero mandarle toda mi fuerza a Chanel, te agarramos del brazo tal y como hacíamos en nuestra canción, hermana. Lo vas a petar", ha escrito la de Barcelona.