El caso del supuesto impago de la pensión de David Flores por parte de Rocío Carrasco se complica para ella. La justicia ha decidido hacer oídos sordos a sus peticiones y continúa adelante con la investigación.
Rociito trató de detener la causa presentando dos alegaciones. Una de ellas era “indefensión” frente a las acusaciones de su marido que, si bien se le investiga por el presunto impago de otras pensiones previas, reclama 200 mensuales desde 2018 para la manutención de su hijo, que vive con él desde entonces.
Alegaciones desestimadas
Asimismo, la hija de La más grande solicitaba la nulidad del caso porque la denuncia fue presentada por el padre del entonces menor y no por el mismo David. Tanto es así que en su última comparecencia, el 30 de abril, en los juzgados de Albobendas (Madrid) que investiga la causa se negó a declarar.
La fiscalía ha recibido ambas peticiones fechadas el 9 de junio y ha desestimado ambas. Por un lado, niega que la acusada se encuentre en situación de indefensión ya que fue notificada en varias ocasiones las actuaciones judiciales. Ella niega la mayor si bien el fiscal apunta que las cartas fueron entregadas por mucho que una se quedara sin abrir en el buzón.
Decisión final
Al respecto de la nulidad, el ministerio público considera que el exguardia civil está "legitimado activamente para interponer denuncia y reclamar su pago vía penal". Lo mismo que el hijo que se personó como “perjudicado” el pasado 21 de mayo.
Carrasco también ha tratado de impedir que se tengan en cuenta las palabras del menor ya que, al hacerse por videoconferencia, ella se encontraba en situación de “indefensión”. La juez, que en su día ya ordenó la investigación del patrimonio de la madre, tiene ahora la última palabra sobre las alegaciones presentadas.