En plena polémica negacionista por la entrevista que concedió Miguel Bosé a Jordi Évole, el cantante pasó unos días en familia junto a sus hijos y los de su ex, Nacho Palau. Pese al controvertido proceso judicial en el que la pareja se encuentra inmersa, donde el artista reclama que los hijos de ambos no sean reconocidos como hermanos, los cuatro niños volvieron a encontrarse.
Ivo y Telmno, hijos del valenciano, viajaron hasta México para visitar el país azteca junto a sus hermanos Diego y Tadeo, hijos de Miguel Bosé, bajo la atenta mirada del propio cantante. Una situación que sorprendió a los medios dadas las últimas polémicas del intérprete de Amante bandido, pero la aventura ha llegado a su fin este martes 20 de abril.
¿Han hecho las paces?
Más de una semana se han quedado los hijos de Nacho Palau en casa de su expareja, Miguel Bosé, pese a la controversia que protagonizaba el cantante en España con sus declaraciones en Lo de Évole. Un reencuentro de hermanos que demostraría que la relación entre Bosé y Palau podría estar mejorando poco a poco.
Sea como sea, el gesto que tuvieron ambos progenitores prueba que lo más importante para ellos, pese a sus pretensiones legales, es que la relación entre los hermanos continúe a pesar de la distancia. Una lejanía que sí le ha pasado factura al valenciano, al que se le ha visto visiblemente impaciente e ilusionado por reencontrarse con sus hijos.
El enfado de Nacho Palau
Ajeno al revuelo que se ha formado tras la emisión de la entrevista de Miguel Bosé, Nacho Palau pidió a la prensa que no les preguntasen por el tema porque los niños estaban "a punto de salir", y no quería que se asustasen con la presencia de las cámaras. Los medios no desistieron, y el valenciano reclamó discreción ante tanta insistencia.
"Están los enanos, por favor", señaló el empresario, algo molesto con la prensa. Pero como cualquier otro padre ilusionado, se olvidó de los paparazis por un momento y los tres se fundieron en un emocionado abrazo, felices por reencontrarse una semana después.