El testimonio de Rocío Carrasco en su documental ha tenido tanta repercusión que ha rescatado historias pasadas. Julián Contreras ha ido al plató de Sábado Deluxe para reaccionar a las duras declaraciones de la hija de Rocío Jurado y compararlas con la de su madre, Carmina Ordóñez.

Carmina denunció malos tratos por parte de su pareja, pero el juez no le dio la razón. Esto puso en duda su testimonio de cara a los medios de comunicación.

Trauma

Julián Contreras presenció una agresión de su madre cuando se despertó por ruidos de golpes. Unos hechos que le marcaron para siempre: “El primer gran trauma de mi vida fue presenciar cómo mi madre era maltratada”. 

"Tenía el camisón desgarrado", ha expresado. "El sujeto se acercó y me dijo 'Julián, va a hacer que la mate'. Entonces mi madre, que tenía muchos cojones, le dijo 'no le hables a mi hijo', y fue entonces cuando él se abalanzó contra ella, agarrándola del cuello y empujándola. Es en ese momento que yo me lanzo contra él, le llevo fuera de la habitación y le empujo por el pasillo", ha contado.

Perfil socioeconómico

“Recuerdo el día en el que mi madre llegó y se sentó en el suelo, se apoyó en el respaldo y me dijo que me iba a contar una cosa”, ha comenzado el hermano de Cayetano y Francisco Rivera, asegurando que sus familiares no conocían los hechos hasta que él se los explicó. 

Entonces su madre le explicó lo que había pasado: “Me dijo que el juez le había dicho que a ella no la habían podido maltratar por ser ella. Tenía escrito en un papel que no respondía al perfil socioeconómico de una mujer maltratada”. Julián ha confesado que todavía no entiende lo que dictaminó el juez: "Me rompo la cabeza y no lo entiendo, ni tantos años después". 

Sin capacidad de reacción

Julián Contreras ha explicado que su madre estuvo “anulada” sin “capacidad de reacción”. Según ha comentado, su madre le confesó que era una mujer maltratada y le explicó que Ernesto Neyra le “golpeó con una plancha”.

Charo Vega, muy buena amiga de Carmina Ordóñez, ha relatado una llamada que le hizo Carmina. “Ven, que me va a matar”, ha asegurado que le dijo. "Yo vi cómo Carmina Ordóñez recibió un gran puñetazo en el estómago por parte de su agresor", ha confesado Vega.