Sofía Suescun ha permanecido callada durante mucho tiempo. Hace poco más de una semana, en cambio, estalló y confesó delante de las cámaras que en su adolescencia fue víctima de abusos sexuales.
La influencer habló por primera vez en Ya es mediodía, programa de Telecinco donde colabora, después de que este 1 de febrero se conociera la sentencia contra Daniel L.O.. El responsable de la agencia de modelos Dana Models ha sido declarado culpable por la grabación de varias chicas, la mayoría de ellas menores.
Manipulador
Ella confesó que fue uno de las testigos del juicio porque ella fue una de las víctimas de este hombre. Ahora, diez días después, ha dado los detalles de qué es lo que vivió.
Sólo tenía 14 años cuando empezó en la empresa del acusado como modelo. "Tengo recuerdos de él mandándome ir a la agencia”, relata. “Iba cogiendo confianza y construyendo esa unión, haciéndote creer que eras especial... Y yo encantada, imagínate la manipulación”, lamenta.
Una llamada
“'Tráete tal conjuntito', me decía. Y yo toda inocente me iba con mi conjuntito de ropa interior porque me iba a hacer un desfile de bikinis", cuenta la concursante de realities. "Este señor era un experto en manipular. Te hacía ver que lo que él te mandaba hacer era algo normal y tenías que aceptarlo”, señala.
Pasó el tiempo de lo que vivió y ella intentó hacer borrón y cuenta nueva. Pero en 2015, tras ganar Gran Hermano 16 recibió una llamada de la policía foral de Navarra. “Habían encontrado unos vídeos míos cambiándome de ropa con este señor dentro de la sala tocándome", lamenta Suescun.
Avergonzada
La joven tuvo que acudir a ver todas las imágenes que hallaron en las que aparecía ella. “Pasé una vergüenza tremenda. No sabía qué cara poner, la situación fue superincómoda”, recuerda. Finalmente, denunció y fue entonces cuando descubrió que hasta otras 128 chicas se encontraron en la misma situación.
El responsable de la agencia de Zaragoza, de 36 años, es culpable de delitos de atentado contra la intimidad de 129 mujeres, 48 de ellas menores, descubrimiento y revelación de secretos y de corrupción de menores. Además de la prisión, el condenado tendrá que indemnizar a cada mujer con 3.000 euros en caso de ser menores y 4.000 euros a siete de ellas por tratarse de un delito continuado. Asimismo, deberá pagar otros 3.000 euros por responsabilidad civil para otras dos menores por el delito contra la libertad sexual.