La cantante mejicana la ha vuelto a liar. No cabe duda de que la relación entre Paulina Rubio y su ex Nicolás Vallejo Najera, alias Colate, está más tensa que nunca. En esta ocasión, ha sido el mismo empresario quien ha anunciado que la policía tuvo que personarse en las puertas de la casa que la cantante posee en Miami. Un hecho que se producía después de que Colate denunciara a "Pau" por incumplir constantemente con la normativa legal que dictó el juez en relación con la custodia compartida del hijo que tienen en común.
Paulina se salta la ley
En un programa de la televisión de Miami, el español manifestaba estar harto de las libertades que se toma su exmujer. Muy indignado, Vallejo relataba cómo había sido la larga espera mientras aguardaba a que la celebrity e entregara a su hijo. "Hoy he ido a recoger a mi hijo y he estado una hora y cuarenta y siete minutos en la puerta de la casa, lo de siempre… me he venido a casa sin mi hijo" explicaba.
Algo a lo que él mismo añadía que tuvo que terminar llamando a la policía para denunciar lo ocurrido. Una situación que tampoco dio los frutos esperados, puesto que la cantante ni se dignó a atender a la pareja de agentes que hasta allí se desplazó.
En manos de abogados
Pero no acaba aquí la cosa. Y es que Nicolás Vallejo lleva más de nueve años litigando por la custodia de Andrea Nicolás. Principal motivo por el cual ha decidido fijar su residencia en la ciudad del estado de Florida.
De hecho, recientemente, Colate se ha visto obligado a interponer una demanda contra la madre de su hijo a quien acusa de padecer severos episodios de desequilibrios mentales y de vivir en un ambiente tóxico y violento.
Mientras tanto, como si no fuera con ella la cosa, Paulina ha aparecido en su cuenta de Instagram, retando a sus casi 2 millones de seguidores para que se sumen a su último challenge. El objetivo: Que la acompañen encima del escenario en la entrega de los premios Billboard.