A la hora de abordar temas como los nombres propios, es crucial tener en cuenta que se debe hacer con respeto. La apreciación de la diversidad cultural es importante, pero debe admitirse que, por tradición, familiaridad e incluso sonoridad pueden sonar extraños a algunos oídos.
Cada nombre es susceptible de sonar bello o feo en función de la historia de cada una. Historias que también se ocultan en los nombres, cuyos significados y conexiones culturales pueden cambian la percepción de que tenemos de él.
Un nombre poco común
Dicho esto, si uno piensa en nombres que se le pueden venir a la cabeza y que uno considera feo o incluso ridículo. Como decidirse no es del todo fácil y ya que la ciencia no se quiere mojar, como sí lo hace con los nombres más bonitos, hemos preguntado al chat GPT, el que parece ser el nuevo oráculo del siglo XXI, y ha dado una respuesta.
A pesar de que esta herramienta trata de mojarse también lo menos posible y da evasivas, lo cierto es que ha dado no uno, sino dos nombres catalanes que pueden sonar feos y ridículos. Uno de ellos es Agnès, pero visto el Idescat, hay más de 1.300 personas en Cataluña que llevan ese nombre, por tanto, tan feo no debe sonar.
El origen de 'Assumpció'
El otro nombre de niña que propone es Assumpció, que ya es mucho menos común. En la comunidad autónoma hay 552 mujeres. Nombre que además tampoco ha calado mucho más allá del territorio, ya que el INE sólo reporta 13 más fuera de Cataluña, repartidas entre Valencia y Alicante.
ssumpció, como bien es sabido, deriva del latín Assumptio, que significa "asunción". Esto, por tradición cristiana nos lleva directamente a la Biblia y a la llamada historia sagradada. Assumpció tiene que ver específicamente com la Asunción de la Virgen María al cielo, una creencia profundamente arraigada en la tradición católica.
Significado religioso y esperanzador
Su impregnación es tal en territorio español que, hoy en día, todavía se celebra el día en que, según cuentan las escrituras evangélicas, la madre de Jesucristo fue llevada al cielo cuerpo y alma al final de su vida terrenal. Este evento es tan significativo para esta cultura es celebrado el 15 de agosto en muchos países católicos, entre ellos España, donde ese día es festivo.
El significado del nombre, por tanto, no es negativo en ningún caso, pese a que ahora suene feo. Para los creyentes, Assumpció es sinónimo de pureza, devoción y elevación espiritual, siendo la Virgen. En cualquier caso, nombrar a una niña Assumpció, parece otorgar al bebé un legado de fe y esperanza.
Ni los derivados
El problema es que las tradiciones pasan. El número de personas que se sienten católicas en Cataluña cada vez son menos y eso hace que caiga en picado el uso de este nombre y que, sus portadoras tengan una media de edad de 68,4 años, según registra el INE.
Incluso derivados del nombre como Assumpta, que tienen una media de edad más joven 59,1 parecen ser rechazados. Apenas hay 462 en toda Cataluña y 506 en resto de España.
Explicación de su 'fealdad'
Preguntado al ChatGPT que hace que este nombre sea tan rechazado, la respuesta es clara: su sonoridad. Asegura esta IA que pronunciado el nombre “puede resultar inusual para aquellos no familiarizados con el catalán o las tradiciones católicas”. Una combinación de factores que pueden ser clave en esta connotación de fealdad en tiempos modernos.
“Los nombres propios a menudo llevan preconcepciones que varían enormemente de una cultura a otra. Lo que en un contexto se considera tradicional y lleno de significado, en otro puede ser percibido como peculiar o incluso inusual”, recuerda esta herramienta.
Razones culturales
Otro factor que lleva a la idea de que Assumpció pueda sonar feo o ridículo es la falta de familiaridad con la fonética y la cultura catalanas que a una más allá características intrínsecas del nombre. Esta percepción, en cualquier caso, subraya la diversidad lingüística y cultural del mundo en el que vivimos y cómo nuestras propias experiencias culturales moldean nuestra percepción de lo que es "normal" o "aceptable".
En cualquier caso, como se ha visto, el nombre puede resultar preciosos para unos, feo para otros. Pero en un mundo tan cambiante como este, en poco tiempo puede volver a estar de moda llamarse Assumpció.