El pueblo catalán que esperaba a Disney (y a Donald y Mickey Mouse)

Hay muchos pueblos de Cataluña que pueden ser escenarios de cualquier película de Disney. Sus castillos y calles de época hacen que municipios como Rupit i Pruit, Besalú o Peratallada parezcan locaciones sacadas de una película de la factoría. Pero hay uno en concreto que esperaba directamente su llegada.

Los más jóvenes pueden pensar que Eurodisney siempre estuvo allí, pero apenas hace 31 años que sus instalaciones abrían sus puertas a las afueras de París. Y antes de que eso sucediera, siete años antes, los ojos estaban puestos en Cataluña.

Vista aérea del Camping Ametlla Campings.com

Repercusión en los medios 

No es una invención. Las noticias que llegaban en 1985 sobre la llegada de Disney a territorio español eran motivo de artículos periodísticos y parte de los telediarios de TVE. Las pruebas las van a poder ver en este artículo.

Para los que se crean más avispados que nadie, advertir que no, PortAventura no es la respuesta al rechazo de la compañía a poner un parque allí. O no del todo. La zona de Vilaseca y Salou no estaba en el punto de mira de la empresa. Sí lo estaba, por eso, otro punto de la provincia de Tarragona.

El pueblo habla

Otra pista es que a ese lugar no llega el AVE. Sí lo hace Renfe. Hay 20 trenes por día que pasan por allí, todos ellos Regionales que ofrecen servicios de media y larga distancia. Para acabar con la incógnita. Se trata de la Ametlla de Mar.

Esta localidad de menos de 7.000 habitantes fue en su día uno de los escenarios en los que Disney planeaba aterrizar en Europa y traer uno de sus parques parecidos a los de Orlando y Los Angeles. La población estaba encantada, el alcalde mismo salía ante las cámaras a hablar de esta posibilidad y alguno ya planeaba dejar la pesca y montarse un hotel. “Aquí sólo nos han traído nucleares, esperemos que ahora nos toque algo mejor”, decía una señora a TVE.

Qué hay L'Ametlla 

Cabe decir que el pueblo merece un parque y mucho más. El encanto de su gente, sus playas de aguas cristalinas y sus 16 kilómetros de arena, y sus casitas blancas la hacen un lugar idílico. Sus calas son variadas y para todos los gustos: de arena fina, de piedras, nudistas, vírgenes… Y además ideal para la pesca, allí es tradicional la captura de atún rojo, entre otras variedades de pescado.

Su gastronomía es reflejo de toda esa tradición. A lo largo del paseo marítimo, pero también por sus calles, uno puede degustar deliciosas paellas de marisco, peces de todo tipo y también carnes a la brasa y otros platos típicos de la cocina catalana.

Cómo llegar                                    

Disney dijo que no a L’Ametlla de Mar. No se sabe si el señor que salía en la tele hizo o no su hotel, pero lo cierto es que ahora, incluso sin el parque temático hay bastantes. Los atractivos del municipio ya son suficiente reclamo. No les hace falta un Eurodisney.

Para llegar hasta allí, sí hay un largo camino en coche. El pueblo se encuentra casi a tocar de la Comunidad Valenciana, sólo un poco antes del Delta del Ebro. Eso no hace que sea difícil acceder allí. La autopista AP-7 llega hasta allí e indica la salida hacia L'Ametlla. No hay pérdida.