Este es el pueblo a 30 minutos de Tarragona que arrasa con sus 30 playas, calas, bahías y costas

La reconocida publicación National Geographic ha señalado a l'Ametlla de Mar como "el epicentro donde miran los tarraconenses cuando les apetece pasar el día en una cala recóndita". ¡Así es! La revista, experta en entornos naturales y destinos turísticos, ha caracterizado este enclave tarraconense "como un festival de playas»".

Pero eso no es todo: National Geographic indica que, en lo que respecta a la Costa Daurada, "acostumbra a asociársele imágenes de playas extensas de arena fina y suave entrada al agua. Y es verdad, pero su existencia no tendría ninguna gracia si no fuera por su reverso: sus otros rincones playeros, coordenadas casi secretas que aparecen solo en el mapa de los iniciados en los gozos del Baix Ebre".

En relación con esto, la publicación destaca que el extremo más sureño de la Costa Daurada se compone de "caminos de ronda, acantilados, playas salvajes y calas secretas. No por nada a los del lugar se les conoce como 'los caleros', porque es aquí donde aún se puede disfrutar del litoral catalán".

Las playas y calas de Ametlla de Mar: algunas recomendaciones

¿Te ha abierto el apetito de visitar Ametlla de Mar tras leer los fragmentos de National Geographic? Pues allá van algunas recomendaciones.

Ametlla de Mar

L'Ametlla de Mar destaca por su diversidad turística, que abarca sus 30 playas, calas,  bahías y costas fascinantes, cinco de las cuales han recibido la distinción ADEC, además de deportes y actividades marinas, e incluso para aquellos con un gusto refinado.

Uno de los principales atractivos es la disponibilidad de playas que permiten mascotas, especialmente en temporada alta. Algunas menciones son: Cala del Bon Caponet y Cala del Cementiri. También recomendamos pasear durante el atardecer por el Estany Podrid. A pesar de su nombre, este lugar es encantador. Se trata de una playa intacta, rodeada de vegetación marina que se extiende hacia la carretera, formando una pequeña laguna de agua cristalina y tranquila, ideal para que los perros disfruten al final del día.

Si prefieres una experiencia naturista, una buena opción es la playa Torrent del Pi; si buscas algo impresionante, la playa de San Jordi y Cala Pepo; y para ir en familia, Cala Forn y Cala Vidre. Estas últimas cuatro están cercanas, por lo que es recomendable visitar el fuerte del siglo XVIII en la playa de San Jordi y disfrutar de un recorrido para apreciarlas todas.

También debes visitar sus playas rocosas, sobre todo si tienes espiritu aventurero. L’Illot es simplemente mágico, aunque llegar es un reto. Pero desde el precipicio, observar esa isla verde y el mar azul profundo, es impagable. Es el escenario perfecto para practicar snorkel, y las aves locales son muy amigables.

L'Ametlla comparte límites con Perelló, Calafat, las Tres Cales y el área de Cap de Santes Creus. El otoño, con su frescura, es el momento óptimo para explorar su litoral siguiendo el sendero GR92, que es el más largo del Mediterráneo y cubre desde Cataluña hasta Andalucía.