La Generalitat gasta 12 millones en "enseñar catalán a las máquinas"

La Generalitat de Cataluña gastará 12 millones de euros públicos durante los próximos cuatro años para culminar su proyecto Aina, con el cual persigue que el catalán se utilice como el castellano o el inglés en aplicaciones basadas en la inteligencia artificial, como por ejemplo los asistentes de voz.

La Consejería de Empresa y Trabajo del Govern secesionista destinará tres millones de euros anuales al proyecto, mediante una subvención directa al Barcelona Supercomputing Center-Centro Nacional de Supercomputación (BSC-CNS), la entidad participada por la propia Generalitat, el Gobierno español y la UPC que se encarga de ejecutar las actuaciones previstas en la hoja de ruta de Aina hasta 2026.

"Infraestructura de país"

El conseller de Empresa y Trabajo, Roger Torrent, y el director asociado del BSC-CNS, Josep Maria Martorell, han anunciado este lunes la inversión para este proyecto, cuyo objetivo es "enseñar catalán a las máquinas" para que la ciudadanía se pueda relacionar con ellas al mismo nivel que los hablantes de una lengua global "y garantizar así el futuro digital de la lengua catalana", según indica el Govern de ERC en un comunicado.

"Queremos que el catalán sea lengua de uso normalizado en el mundo digital. En este sentido, el proyecto Aina es una infraestructura de país que necesitaba estabilidad presupuestaria hasta su finalización para garantizar que podrá culminarse con éxito y retener el talento que lo hace posible", afirma Torrent.

El conseller sostiene que, una vez culminado el proyecto, se podrán ofrecer "las piezas necesarias" para que cualquier empresa u organización pueda crear sus propias aplicaciones e incluir el catalán de forma "normalizada" en sus servicios digitales.

"Ninguna empresa podrá tener excusa"

Martorell, por su parte, considera que la garantía de financiación es "una noticia excepcional" porque les permite dar continuidad al equipo que trabaja en el proyecto: "Cerrar esta nueva etapa de Aina garantizará que nunca más ninguna empresa grande o pequeña pueda tener una excusa para no incorporar el catalán en sus servicios textuales, visuales o de audio".

Aina es un proyecto basado en tecnologías de datos e inteligencia artificial (AI) impulsado por el Gobierno y el BSC, y abierto a colaboraciones, con el objetivo de conseguir que la tecnología entienda y hable catalán.

Para alcanzar este objetivo, el proyecto Aina desarrolla la infraestructura necesaria para que la inclusión del catalán en las aplicaciones de IA sea atractiva y viable, tanto para las grandes compañías tecnológicas como para la industria local, de forma que cualquier empresa u organización incluyan este idioma en sus soluciones o servicios específicos (traductores, asistentes personales, sintetizadores de voz o clasificadores de textos, entre otros).

Hablar con las tostadoras

La idea de interactuar en catalán con las máquinas es una de las fijaciones del nacionalismo catalán. Ya en la campaña electoral de las pasadas autonómicas, la entonces candidata de Junts per Catalunya, Laura Borràs, candidata de Junts per Catalunya (JxCat), destacó entre sus propuestas electorales "incentivar el uso" de la lengua catalana en todos los ámbitos de la vida. Entre ellos, el de la tecnología y el internet de las cosas (IoT), incluyendo electrodomésticos.

"¡Sólo faltaría que no pudiéramos dirigirnos en catalán también a las máquinas!", proclamó Borràs durante un acto de campaña en el Parc UPC de la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC).

Borràs, firmante del manifiesto Koiné que plantea que el catalán sea la única lengua oficial de Cataluña, hacía suya de este modo la reivindicación del activista secesionista Àlex Hinojo: "Él dijo que quería poder hablar en catalán con su tostadora", dijo. "Pues eso es lo que se está cociendo aquí, y eso es lo que el internet de las cosas hará posible. Y, por tanto, podremos decir: 'quiero una tostada, ¡arranca tostadora!'; o '¡ponte en marcha, lavadora!'", dijo Borràs en su intervención en la UPC en febrero de 2021.