Apple decepciona con su chip de segunda generación para el Mac
El procesador M2 tiene cinco nanómetros, los mismos que su versión anterior, pese a que TSMC prevé superar este umbral en 2022
7 junio, 2022 12:02Ni rastro de los tres nanómetros. El chip nativo de segunda generación presentado ayer por Apple, el M2, no supondrá el salto tecnológico esperado por los seguidores de la casa de la manzana mordida. Durante la Conferencia Mundial de Desarrolladores, la multinacional estadounidense ha anunciado el lanzamiento del MacBook Air y el MacBook Pro de 13 pulgadas con un estándar de cinco nanómetros, los mismos que posee su versión anterior M1.
Ello pese a que el fabricante taiwanés TSMC, proveedor de los chips usados por Apple, lleva tiempo desarrollando semiconductores de tres nanómetros. En su última reunión de inversores, la firma asiática comunicó incluso su comercialización este 2022. Sin embargo, Apple no ha incluido esta generación en su nuevo portfolio de productos.
Inferior al M1 Pro y M1 Max
Pese a ello, Cupertino ha esgrimido las ventajas que trae el M2 respecto a su hermano pequeño. "El M2 lleva aún más lejos el rendimiento por vatio líder en el sector del M1 gracias a una CPU un 18% más rápida, una GPU un 35% más potente y un Neural Engine un 40% más rápido", ha afirmado la compañía.
El nuevo semiconductor dará mayor rapidez y eficiencia a los dispositivos con el mismo consumo, pero queda por detrás de las versiones vitaminadas de M1. Así, el M1 Pro y el M1 Max cuentan con 33.700 millones y 57.000 millones de transistores, respectivamente. El M2 se queda en 20.000 millones.
¿Salto tecnológico?
Respecto a la GPU --siglas de unidad de procesamiento gráfico--, la segunda generación de chips propios suma dos núcleos más que el M1 hasta la cifra de 10. "En comparación con el chip de 10 núcleos más avanzado en un PC portátil, la CPU del M2 ofrece casi el doble de rendimiento con el mismo nivel de potencia", presume la marca. Pero de nuevo queda por detrás de las modalidades precedentes. El M1 Pro alcanza los 16 núcleos y el M1 Max, los 32.
Apple puso el listón muy alto cuando decidió diseñar sus propios microprocesadores para, precisamente, dar el salto tecnológico que su acuerdo con Intel le impedía alcanzar. Han pasado dos años desde que el M1 rompió los estándares del mercado. Con el M2, la multinacional mejora sus prestaciones, pero no llega al nivel de optimización del aldabonazo de 2020.