Hace algún tiempo pensábamos que desbloquear el teléfono o cualquier otro dispositivo con la cara era algo que sólo ocurría en las películas de ciencia ficción. Pero la verdad es que, ahora, se ha convertido en una práctica habitual para muchos usuarios. La tecnología y la innovación avanzan a pasos agigantados y ofrecen unas funciones a lo Minority report que no hubiéramos imaginado ni en nuestros mejores sueños (o pesadillas, depende de cómo se mire).
Sin embargo, el reconocimiento facial puede servir para mucho más que para acceder a nuestros móviles. Así, el Payment Innovation Hub de Barcelona, liderado por Silvana Churruca, ha estado probando y desarrollando a lo largo de 2019 varias soluciones de pago facial que podríamos ver muy pronto en entornos reales.
Pagos faciales con CaixaBank en algunos supermercados
En concreto, uno de los partners de este hub, Caixabank, está en conversaciones con supermercados para implantar este sistema de pago en varios establecimientos este mismo 2020. “A lo largo de este año podríamos ver algún lanzamiento, ya que existe bastante interés”, avanza Joan Morlà, director general de Payments de CaixaBank. Asimismo, Morlà subraya a Crónica Global que, de llegar finalmente a un acuerdo, la idea es que este servicio esté disponible y se pueda probar en Barcelona, así como en otras ciudades fuera de Cataluña.
Con los tres pilotos de pago biométrico que el Payment Innovation Hub puso en marcha durante nueve meses el año pasado --de la mano de Rodilla, Viena y Nestlé-- el equipo de esta joint venture se dio cuenta de que los casi 500 usuarios que probaron estos servicios mostraron una alta predisposición a usarlos en caso de que, algún día, lleguen a los comercios a pie de calle. “El 50% de los usuarios que usaron el pago por reconocimiento facial, lo acabaron eligiendo como su método habitual”, recuerda Churruca.
Por ello, grandes multinacionales y empresas de la talla de Caixabank, Samsung, Global Payments, Visa y Arval no dudan en subrayar que más que el futuro, este tipo de pagos es el presente.
La integración de los asistentes de voz en los sistemas de pago
Pero los pagos con la cara --que no por la cara--, no es la única novedad en este sentido que podríamos ver a corto plazo. Los asistentes de voz como Alexa, de Amazon; Siri, de Apple; Assistant, de Google; o Bixby, de Samsung; están cada vez más presentes en nuestras vidas. Nos ayudan a saber el clima que hace, a conocer si pillaremos algo de tráfico para ir al trabajo, a hacer alguna reserva, poner una alarma o fijar un temporizador para que no se nos queme la cena. Pero las habilidades de estos asistentes puede ir más allá. De hecho, cada año vemos nuevas funciones. ¿Y qué te parecería pagar con la voz a través de tu asistente favorito?
“Nuestros centros de I+D están trabajando en la integración de Bixby en nuestra plataforma Samsung Pay para poder pagar con la voz”, detalla David Alonso, director de Negocios de Empresa para la firma surcoreana en España. Aunque, prudente, Alonso no se atreve, de momento, a dar ninguna fecha prevista para la implementación de este servicio en 2020.
Con el foco en la seguridad y el cliente
El Payment Innovation Hub reconoce que existen ciertas barreras y miedos en relación a estos nuevos sistemas de pago. Uno de los retos es mantener, en todo momento, la seguridad del cliente. “Cuando hablamos de dinero, la seguridad se tiene que cuidar mucho. El pago por voz no está disponible ahora, pero la verdad es que llegará seguro”, añade Alonso. No obstante, este directivo de Samsung recuerda que existe una regulación que hay que cumplir y que exige el doble factor de autenticación para hacer pagos. Además, lo más importante, según Alonso, es la aceptación del usuario. “Podemos buscar la manera de implementar el pago facial --o por voz-- en algunos espacios, pero sobretodo hay que hacerlo de una manera fácil y segura para el usuario”, añade.
En ese sentido, Mike Cottrell, vicepresidente de producto de Global Payments, insiste en que, a pesar de las reticiencias que puedan haber, “desde la perspectiva de la seguridad, el reconocimiento facial es un sistema más seguro que el contactless”. De manera que, si nos hemos acostumbrado al pago sin contacto, tal vez ocurra lo mismo con los nuevos servicios que lleguen este año.