
Christian Clavier, un actor enamorado de la comedia EFE
Christian Clavier, un actor enamorado de la comedia: "El humor es una forma de elegancia"
El intérprete francés defiende el poder de hacer reír con la película 'Algo le pasa a mi yerno'
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Christian Clavier lleva ya más de 100 comedias a sus espaldas. Es un cómico de pura cepa que defiende sin miramientos el arte de hacer reír. No está por la consideración intelectual o política del género.
“Eso son clichés”, reprocha cuando se le pregunta al respecto. Aun así, si uno estudia su biografía ve que de joven estudió ciencias políticas.
“Hice estudios en la universidad porque podía hacerlos, y eso me permitió empezar a trabajar teniendo cobertura de salud y comer en el restaurante de estudiantes, pero nunca quise hacer estudios políticos”, revela en una entrevista a Crónica Global para el estreno de Algo le pasa a mi yerno.
Como bien indica el título de esta cinta dirigida por Arnaud Lemort, aquí el protagonista es el suegro que, por enésima vez, interpreta el actor francés. ¿Casualidades? Para él sí.
Un psiquiatra particular
“Lo que me interesaba no era precisamente el papel de suegro, sino el de un psiquiatra que tiene que poner sus emociones de lado y mostrar siempre su lado amable, con una sonrisa”, detalla. Pero ¿qué hace especial a este psiquiatra? Su yerno.
La cinta narra la historia de este especialista en salud mental, el doctor Béranger (Clavier), que se vuelve a encontrar a un expaciente suyo (Baptiste Lecaplain) con muchos problemas, pero en su propia casa. Su hija (Claire Chust) ha decidido casarse con él. El médico va a intentar por todos los medios que su hija abandone a su pareja, pero tiene un hándicap: no puede revelar nada de su expaciente. Y es allí donde empieza la comedia.

Escena de 'Algo le pasa a mi yerno' A CONTRACORRIENTE FILMS
“Eso es lo que es divertido” del film, sostiene Clavier. Su personaje “es un psiquiatra que está atacado por sus emociones, aunque no debería estarlo por su trabajo. Podríamos decir que es un psiquiatra que necesita un psiquiatra”, sentencia.
Muchos allí pueden encontrar impedimentos para desarrollar una comedia. ¿Se está haciendo mofa de algún problema de salud mental? ¿No se trata de hacer reír con un padre que quiere imponer sus deseos al amor de su hija?
Clavier, firme con su personaje
Nada que ver, aquí todo es comedia. Es un humor blanco, una comedia de situación, el tipo de films que ama Clavier que lo llega a comparar con un thriller o una peli de suspense, porque “él tiene a su paciente con problemas que no quiere para su hija”.
“Seguramente, sí, se equivoca en la manera de hacer, incluso con respecto a su propio paciente. Pero podemos comprender perfectamente por qué lo hace”, alega. “Lo que tenemos es un personaje que es muy neurótico”, razona, “un padre extremamente protector” y un “psiquiatra que se equivoca con su paciente”.
Un defensor de la comedia sin límites
Humor sin miramientos, porque él solo desea “que no haya límites para el humor”, un debate muy extendido en España y que afirma que “es una lástima”. “Yo amo la comedia como espectador. Me parece que la comedia forma parte de la vida y a su vez se distancia de la realidad, que a veces es tan difícil”.
Su defensa por el género es tal que asevera que “poder hacer reír, el humor, es una forma de elegancia” y él se siente afortunado de poder dibujar una sonrisa en la cara de los espectadores. “Por lo que sea, yo tengo el don de poder hacer reír a la gente. Así que he tenido la suerte de hacer muchas comedias y me siento un privilegiado”.

Christian Clavier 'Algo le pasa a mi yerno' A CONTRACORRIENTE FILMS
“Yo lo que quiero es que la gente vaya al cine, que vea comedias, se relaje y se lo pase bien”, defiende y recuerda que eso sucede porque “la comedia afecta a todo el mundo”. Sostiene que es un género “totalmente transversal”. “Por eso se hacen tantas cada año y se emiten tanto en televisión a lo largo de los tiempos y la gente las vuelve a ver”, teoriza.
Su amor por el humor es tal que, a lo largo de su carrera, él también se ha puesto a escribir comedias como guionista. De sus manos salieron los guiones de comedias francesas tan míticas como la saga de Los visitantes, con Jean Reno, con quien ha hecho varios films, o la más reciente Misterio en Saint-Tropez. Incluso llegó a dirigir La familia no se acoge.
El trabajo de su vida
Ninguno de esos trabajos le ha impedido hacer lo que más le gusta, actuar. Algo para lo que siente que ha nacido.“Yo hice teatro porque siempre quise hacer comedia” De hecho, durante mucho tiempo formó parte de una compañía de teatro, pero cuando el cine lo llamó se quedó atrapado.
Así, año tras año, con éxitos como Dios mío, ¿pero qué te hemos hecho? con la que arrasó tanto en Francia como en España, y esta última, Algo le pasa a mi yerno, cuyo éxito ha llevado a millones de espectadores a las salas en el país vecino. Y él, feliz de que así sea, feliz de hacer reír. “Es lo único que puedo hacer, y es lo que sé hacer bien. Eso es mi vida”, concluye.