El crítico e intelectual frances Michel Ragon

El crítico e intelectual frances Michel Ragon LOUIS MONIER

Creación

Michel Ragon: la paradoja de ser un autor fundamental y, sin embargo, totalmente desconocido

Una exposición en La Virreina reivindica la figura del prolífico intelectual, con especial atención en su crítica de la arquitectura

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Decía Valentín Roma, director de La Virreina Centre de la Imatge, durante la presentación de la temporada, que en las exposiciones del 2025 habría grandes autores para cada uno de los contextos específicos.

Sostenía también que puedes ser fundamental y, sin embargo, totalmente desconocido, y señalaba a Michel Ragon (Marsella, 1924-Suresnes, 2020) como uno de esos “nombres ineludibles que, sin embargo, no están tanto ni en los vocabularios ni en el imaginario general”.

Michel Ragon: ¿Y después de Le Corbusier?, uno de los platos fuertes de La Virreina, pretende, de algún modo, saldar una deuda con una de las figuras fundamentales del pensamiento europeo de la segunda mitad del siglo XX que, aun así, ha pasado desapercibida. De hecho, esta muestra, abierta hasta el próximo 11 de mayo, es la única que se le ha dedicado en España hasta la fecha.

Imagen de la exposición de La Virreina

Imagen de la exposición de La Virreina

Lo hace además centrando el eje curatorial en su faceta como crítico de la arquitectura y sus análisis sobre el legado, todavía omnipresente, de Le Corbusier, uno de los padres de la arquitectura moderna.

Un pensador multifacético y fundamental

Los comisarios Fernando Marzá y Neus Moyano han realizado una investigación exhaustiva de la trayectoria intelectual del pensador francés para alumbrar una exposición realizada a partir del Fondo Michel Ragon conservado en los Archives de la critique d’Art de la Universidad de Rennes.

Autodidacta e irreverente, antes de convertirse en un reflexivo teórico de la arquitectura, la ideología libertaria y anarquista ya era una constante en sus intereses y en su multifacética trayectoria.

Porque, como bien subrayó Valentín Roma, además de un historiador de la arquitectura, “Ragon es un crítico de arte, un escritor libertario, un poeta, un antólogo y un comisario trascendental”.

Ideología libertaria y anarquista

La exposición se adentra en su biografía en el París de posguerra cuando de la mano del escritor proletario Henry Poulaille entra en contacto con los círculos intelectuales libertarios de la capital francesa.

Junto a él fundó la revista Les Cahiers du Peuple, y fue Poulaille quien le animó a redactar sus primeros textos de literatura proletaria recogidos en Les écrivains du peuple, de 1947.

La exposición sobre Michel Ragon recupera una figura fundamental del pensamiento europeo del siglo pasado

La exposición sobre Michel Ragon recupera una figura fundamental del pensamiento europeo del siglo pasado LA VIRREINA

Su afinidad con la ideología anarquista, así como su vinculación con el arte y sus raíces populares, resulta fundamental para entender su aproximación a colectivos, como el grupo CoBrA donde se reafirma en “su concepción de la expresión creativa y el rol social del arte”.

El descubrimiento de Le Corbusier

Durante toda su vida, Ragon estuvo en contacto con pensadores y activistas libertarios, como Louis Lecoin y el anarquista Gaston Leval, dos de sus principales referentes.

Para los comisarios, “este hilo rojo impregna la actividad de Michel Ragon durante toda su vida en ocupaciones tan dispares y aparentemente burguesas como la de crítico de arte y arquitectura. Es desde esta posición moral desde donde interpreta toda su actividad en relación con el arte, la edición, la crítica y la gestión cultural”.

Como gestor cultural, en 1956 es designado comisario de la sección de artes plásticas del Festival d’art d’avant-garde, dirigido por el director y escenógrafo Jacques Polieri, en la recién estrenada Unité d’habitation de Marseille de Le Corbusier.

Es allí donde “Ragon descubre la obra del arquitecto suizo y decide dar un giro en su carrera de crítico de arte, que orienta a partir de ese momento hacia la crítica de la arquitectura”, explican Marzá y Moyano.

Arquitectura social y urbanismo

Sus análisis y reflexiones sobre la transformación social y sus vínculos con la arquitectura y el urbanismo los traslada a libros como Le livre de l’architecture moderne (El libro de la arquitectura moderna), publicado en 1958; Où vivrons-nous demain? (¿Dónde viviremos mañana?), de 1963; L’urbanisme et la cité (El urbanismo y la ciudad), 1964; Paris, hier, aujourd’hui, demain (París ayer, hoy, mañana), escrito en 1965; y Les cités de l’avenir (Las ciudades del futuro) de 1966.

En todos y cada uno de sus escritos, Ragon aportaba su visión independiente e inconformista del panorama arquitectónico y artístico de la segunda mitad del siglo XX.

Esta etapa de su trayectoria no se entendería en profundidad sin su estrecha vinculación con el GIAP (Grupo Internacional de Arquitectura Prospectiva), un colectivo de jóvenes arquitectos, fundado en París en 1965, formado por Yona Friedman, Ionel Schein, Paul Maymont, Nicolas Schöffer, Walter Jonas y George Patrix.

Denise y Yona Friedman, Claude y Naad Parent, Paul Maymont, Michel Ragon, Georges Patrix, Jean Maneval y, delante, Marc y Anne Gaillard en la casa de Françoise y Michel Ragon, 1978

Denise y Yona Friedman, Claude y Naad Parent, Paul Maymont, Michel Ragon, Georges Patrix, Jean Maneval y, delante, Marc y Anne Gaillard en la casa de Françoise y Michel Ragon, 1978 CORTESÍA DE A. PATRIX, FR

Sus integrantes cuestionaban la vigencia de la Carta de Atenas, y de la arquitectura funcionalista después de Le Corbusier, en busca de nuevos paradigmas urbanísticos.

En este ejercicio para definir las ciudades del futuro con otros criterios, el GIAP ya anticipó muchos de los retos a los que se enfrentan hoy urbanistas y arquitectos, como la vivienda social, la energía solar en la arquitectura, las megaestructuras, el urbanismo subterráneo o los grupos de poder que definen el trazado de nuestras ciudades.

El 14 de diciembre de 1975, en una conferencia en la Sorbona sobre la práctica arquitectónica y sus ideologías, Michel Ragon dijo: “La arquitectura, que es a la vez un arte y una ciencia, que conjuga lo estético y lo político, nos permite unir nuestras preocupaciones sociales a nuestras preocupaciones estéticas”.

Era sin duda una de las muchas reflexiones surgidas en los debates de la GIAP que buscaban romper con las directrices establecidas por la generación de Gropius y de Le Corbusier.

La muestra recorre la trayectoria de Michel Ragon con especial atención en la crítica arquitectónica

La muestra recorre la trayectoria de Michel Ragon con especial atención en la crítica arquitectónica

Les acusaron de utópicos, pero no por ello dejaron de imaginar un futuro en el que las ciudades y la arquitectura fueran un vehículo extraordinario de transformación social.

“Nuestro último trabajo nos lleva a constatar que la ciudad democrática, que tenía que ser la consecuencia de la revolución industrial, sigue siendo un espejismo. Pero es en esta ciudad democrática que está por construir donde nuestra vida cotidiana podría encontrar su expresión urbana”.

Medio siglo después de este discurso, muchas de las cuestiones planteadas por Michel Ragon interpelan de forma asombrosa al mundo de hoy. Es, sin duda alguna, un clásico en plena vigencia.