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El BCE baja los tipos a un histórico mínimo del 0,15%

La nueva rebaja, que sitúa los tipos de interés en la zona euro en su mínimo histórico, es la sexta que emprende Draghi desde que llegó al cargo, hace dos años y medio, rompiendo con la política restrictiva de su predecesor, el francés Jean-Claude Trichet.

5 junio, 2014 21:06

Mario Draghi ha vuelto a tomar medidas enérgicas. El Banco Central Europeo, que preside el italiano, ha decidido este jueves bajar nuevamente los tipos de interés, hasta el 0,15%, con la idea de favorecer la circulación del crédito y, así, estimular la economía de la zona euro.

La nueva rebaja, que sitúa los tipos de interés en la zona euro en su mínimo histórico, es la sexta que emprende Draghi desde que llegó al cargo, hace dos años y medio, rompiendo con la política restrictiva de su predecesor, el francés Jean-Claude Trichet. La última de las rebajas fue en noviembre, cuando el BCE situó el interés del dinero que presta a los bancos al 0,25%. Pero el BCE ha considerado que había que rebajarlos aun más.

Con esta medida, se espera facilitar el crédito, restringido durante los años de la crisis, para favorecer una recuperación económica que está resultando más incipiente de lo que se esperaba.

La clave: que el dinero circule

Además, el BCE ha decidido situar el tipo de interés aplicable a la facilidad de depósito en negativo, al -0,10%. Esto significa que el BCE no solo no pagará interés a los bancos que depositen sus fondos en él, sino que les cobrará. La medida también debería estimular a los bancos a hacer circular su dinero, aunque los analistas no se ponen de acuerdo en los efectos que pueda tener.

Además, Draghi ha anunciado nuevas inyecciones masivas de liquidez en el sistema, en forma de subastas para los bancos en septiembre y diciembre de este mismo año, por un valor total de 400.000 millones de euros.

Como las anteriores, esta medida también va destinada a favorecer el crédito y estimular la economía. En este sentido, Draghi ha explicado que el BCE fiscalizará que los bancos destinen el importe obtenido en estas subastas en operaciones de la economía real, y no en operaciones financieras. También quedan excluidos los préstamos inmobiliarios.