Fábrica de Plásticos Ta-Tay en Montornès del Vallès / CG

Fábrica de Plásticos Ta-Tay en Montornès del Vallès / CG

Confidente VIP

Plásticos Tatay crece durante la pandemia

Este productor de menaje de cocina, baño y jardín pertenece a Eduardo Miralta Gonçalves de Faria

7 abril, 2022 00:00

Grupo Plásticos Tatay, de Barcelona, se anotó un alza de las ventas del 3% en el ejercicio 2020, pese a los azotes del coronavirus.

El avance situó la facturación consolidada en 37,4 millones. Estos se reparten en sumas exactamente iguales entre el mercado doméstico y las ventas internacionales. En ambos casos el negocio experimentó progresos.

Resultados

El beneficio de explotación casi se dobló de 2,3 a 4,4 millones. A continuación, Tatay registró un resultado financiero negativo de 952.000 euros, cuando un año antes había contabilizado un superávit de 4 millones.

El viraje explica el descenso de las ganancias netas consolidadas, que pasaron de 5,4 a 2,6 millones.

Actividad exterior

Tatay repartió un dividendo de 6,1 millones, cargado contra las reservas sociales. Debido a ello, los fondos propios del grupo se contraen de 17,8 a 14,4 millones.

Plásticos Tatay incluye media docena de filiales, entre ellas cuatro sitas en Portugal, Francia, Italia y Rumanía.

Fábricas en Montornès y Bucarest

La sede central del consorcio está en el paseo de Gracia de Barcelona. Ta-Tay cuenta con dos plantas industriales sitas en Montornès del Vallès y Bucarest (Rumanía).

El producto se almacena en un depósito logístico propio ubicado en Martorelles. Los inmuebles están valorados al precio de coste de 14 millones.

Productos

El consorcio manufactura 12.000 referencias distintas de menaje de cocina, baño y jardín. La venta se lleva a cabo por medio de más de 2.100 tiendas multimarcas.

Tatay puso en marcha en los meses más duros del confinamiento varios expedientes de regulación y suscribió préstamos ICO por importe de 3,7 millones. Así, la deuda bancaria se cifra en 8,5 millones.

Casi un siglo de historia

Grupo Tatay nació en los años 30 del siglo XX como un taller de metalistería. Lo fundó Eduardo Miralta Baltá.

En los años cincuenta adquirió la primera máquina de inyección de plásticos de España y lanzó al mercado el chupete Tatay, un producto muy exitoso del que se vendieron millones de unidades.