La productora de plásticos Class suspende pagos en Barcelona
Otras once compañías catalanas entran en procesos de insolvencia judicial
8 diciembre, 2021 00:00Class Plastics, de Martorelles, ha presentado concurso de acreedores, con un activo de 10 millones de euros y unas deudas de 9,5 millones. El grueso de esta última suma corresponde al pasivo bancario.
El Juzgado Mercantil 9 de Barcelona declara el fallido y ordena la intervención de las facultades de administración, que quedan sometidas al gestor concursal.
El descalabro está motivado por la pandemia del coronavirus. Para superar la crisis, el año pasado solicitó y obtuvo avales del ministerio de Economía, por importe de 1,2 millones de euros.
Negocio declinante
En 2020 las ventas bajaron un 30%, hasta 4,1 millones. Los resultados viraron en redondo y contabilizaron una pérdida de 1,5 millones, frente a ganancias de 284.000 euros en 2019.
Class se dedica a la producción de plásticos por inyección. Se fundó ocho años atrás en Rubí. En 2017 se instaló en una planta fabril de Martorelles, que antes había estado ocupada por Valeo, del sector auxiliar del automóvil.
Class Plastics está dotada de un capital de 798.000 euros. El 44% pertenece a la sociedad Konferium, de Sant Cugat del Vallès, propiedad de Ricardo Rovira Sabater. El administrador único de Class Plastics es Joan Repiso Torelló. La plantilla consta de 80 trabajadores.
Al margen de este fiasco, Crónica Global ha tenido concimiento de otros once fallidos de compañías catalanas. Son los siguientes:
Más fracasos
BCN Soluciones Servicios Integrales, de Igualada, fabricante de expositores comerciales. Administradores, Luis Miguel Esteban Frías y Manuel Cruz Humánez.
Comercial QBD, de Sant Boi de Llobregat. Con la marca QBDFashion Barcelona, recicla y personaliza plumas naturales para crear adornos de lujo destinados a diseñadores de moda de alta costura. Administradores, Meritxell y Albert Romeu Sala.
Global Iberican Entity, de Mataró, consultora empresarial. Administrador, Oliver Díez Ranft.
Renovables y electrónica
Itestit, de Sabadell. Desarrolla tecnologías y sistemas para instalaciones de energías renovables. Tiene de administradora a la sociedad Garage Lab, representada por Jordi Cusidó Roura.
Kfew Systems, de Castellar del Vallès, dedicada a producir aparatos electrónicos para la detección de fallos en motores de maquinaria. La compañía escritura un capital de 790.000 euros. Está presidida por la sociedad Digiproces; en su nombre ejerce Jordi Batet Sancliment.
Lacados, Barnizados y Aplicaciones en Madera, de Barcelona, fabricante de muebles de madera. Administrador y socio único, Eduardo Montoro Mengibar.
Mecanizados e ingeniería
Maservin 14, de Rubí, constructora e inmobiliaria. Gerente, Claudia Alejandra Carvajal Tascón. Maservin ha entrado en liquidación.
Nouteme SA, de Badalona. Diseña y construye utillaje de fijación para mecanizados y calibrados de control. Está encabezada por Aleix Rovira Navarro, presidente ejecutivo; los vocales del consejo de administración son María del Carmen Jurado Gallardo, Xavier Duran Duelt y José Luis Salas López
Okili Dokili, de Barcelona, de instalaciones eléctricas y servicios técnicos de ingeniería. Administrador, Patrick Schmelz.
Piscinas y plantas aromáticas
Piscinas Costa Brava, de Lloret de Mar, instaladora de piscinas y albercas, así como distribuidora de productos químicos.
Por último, es de reseñar el castañazo judicial de Vandalitia Cannabum, con sede en el municipio almeriense de Uleila del Campo, dedicada a la producción y venta de plantas relajantes, euforizantes y aromáticas. Pese a estar domiciliada en el municipio andaluz citado, la empresa ha promovido el concurso ante el Juzgado Mercantil 1 de Girona.
Este siniestro total reviste una particularidad digna de mención. Vandalitia se constituyó el 5 de mayo de 2021. Es decir, solo ha tardado seis meses en precipitarse al pozo de la quiebra judicial. El administrador es Marc Villafañe Valero. Este ejerce actualmente de socio-director de Alfamèdic, que presta servicios sanitarios en Palamós y Lloret.