Tobías Martínez, consejero delegado de Cellnex (izq.), y Bertrand Kan, presidente no ejecutivo / CELLNEX

Tobías Martínez, consejero delegado de Cellnex (izq.), y Bertrand Kan, presidente no ejecutivo / CELLNEX

Business

Cellnex cierra la etapa de las compras en busca de la excelencia financiera

La compañía mantiene sus objetivos a 2025 pero a base de crecimiento orgánico y mejorar su calificación crediticia dado el complicado escenario macroeconómico que se avecina

14 noviembre, 2022 00:00

Cellnex acaba de culminar formalmente la adquisición de los activos de CK Hutchison en Europa, la mayor operación de su historia, y con ello ha puesto fin a una intensa etapa de expansión a base de adquisiciones, cimentada en inversiones superiores a ls 36.000 millones de euros. Sin perder los objetivos a largo plazo, la compañía cambia el perfil y se dispone a iniciar una nueva era, basada en el crecimiento orgánico y con la vista puesta en lograr una mejor calificación crediticia con vistas al complicado panorama macroeconómico que se adivina en el horizonte. 

El cambio de paradigma de la compañía que dirige Tobías Martínez, el consejero delegado que ha pilotado todo este proceso, ha sido bien recibido por el mercado, que ha devuelto a Cellnex un lugar entre los cinco primeros componentes del Ibex 35 por capitalización bursátil, por encima de los 26.000 millones de euros, lejos, eso sí, de sus máximos históricos.

Próximo capítulo

La publicación de resultados del tercer trimestre, que han permitido a Cellnex reafirmar sus objetivos para el conjunto del año, han coincidido con el final de la operación de Hutchison, dos años después de ser anunciada por primera vez y tras una inversión de 10.000 millones que ha ampliado la cartera de la compañía a doce países y más de 110.000 emplazamientos. 

El epílogo de honor para un libro escrito durante siete años, desde la salida a bolsa en 2015 (cuando la empresa apenas contaba con unas 7.000 antenas en España e Italia), y del que ahora Cellnex quiere escribir “el siguiente capítulo”, como reza la presentación que ha utilizado para explicar a los analistas cuáles serán los próximo pasos de la empresa.

A por el grado de inversión

Un camino que tendrá como objetivo prioritario conseguir para sus bonos el grado de inversión por parte de la agencia Standard & Poor’s, como ya tiene el de Fitch. Recientemente, la gestora de infraestructuras de telecomunicaciones consiguió que la primera mejorara la perspectiva, de estable a positiva, con lo que dejaba la puerta abierta a una revisión al alza que podría llegar entre los próximos 12 y 24 meses. 

La excelencia financiera que ahora persigue Cellnex se antoja capital en un entorno de elevada inflación e intensas subidas de tipos de interés por parte de los principales bancos centrales, que está penalizado de forma notable a las empresas con mayor endeudamiento y apalancamiento. 

Retornos exigentes

De ahí que Cellnex haya decidido echar el cierre temporalmente a las operaciones de compra de gran volumen y vaya a centrarse en la consolidación de los negocios existentes y en mejorar y ampliar su relación con los clientes. 

La compañía moderará el ritmo inversor de los últimos años y centrará su capex en proyectos en desarrollo relacionados con sus clientes a los que aplicará estrictos criterios de retorno de la inversión, entre el 6% y el 8%, para llevarlos a cabo.

Dividendos 

Cellnex espera alcanzar con estas directrices los objetivos fijados en el plan estratégico 2021-2025, con un flujo de caja libre que empezará a ser positivo a partir de 2024 y que le permitirá repagar a partir de 2027 la deuda emitida durante estos años destinada a financiar el crecimiento.

Además, la consecución del grado de inversión por parte de S&P abrirá la puerta a mejorar la remuneración al accionista, a través de dividendos o mediante programas de recompra de acciones. Hasta la fecha, Cellnex abona una retribución simbólica a sus socios, con cargo a reservas dado que sus resultados contables aún arrojan pérdidas como producto de las amortizaciones y gastos financieros procedentes de las adquisiciones de estos años.

Sin operaciones

Tras acordar la compra de la cartera de emplazamientos de Hutchison en Europa, Cellnex se ha interesado por otras grandes operaciones en el mercado, en especial las protagonizadas por operadoras de referencia que se han deshecho de sus activos de infraestructuras. 

Con la digestión financiera del acuerdo con el gigante de Hong Kong, Cellnex se ha interesado por Telxius, por las antenas de Deutsche Telekom en Alemania y Austria y por el negocio de Vodafone; en ninguno de los casos se ha impuesto en los procesos, en los que ya ha aplicado criterios de prudencia financiera.

Una circunstancia que ha sido recogida en positivo por el mercado, que ha reaccionado con significativas alzas a cada intento fallido de Cellnex por ampliar su perímetro.