Llega un día clave en el contexto de la operación lanzada por BBVA para hacerse con Banco Sabadell, como es la presentación de resultados semestrales de la entidad opada, que además llega a la cita en condiciones más que privilegiadas. Nada menos que en máximos bursátiles desde que se conoció la nueva ofensiva de su competidor, y a la menor distancia de la contraprestación incluida en la OPA hostil con la que el banco vasco pretende articular la maniobra.
Las acciones de la compañía presidida por Josep Oliu han rozado la cota de dos euros, por debajo de la que ha cotizado a lo largo de los últimos nueve años, desde poco después de anunciar la compra del británico TSB.
Un terreno, por lo tanto, desconocido también desde que el pasado 30 de abril trascendiera la intención de BBVA de volver a la carga para absorber el Sabadell, después de la tentativa frustrada de finales de 2020, que derivó en la OPA hostil anunciada el 9 de mayo, tras el rechazo del consejo de administración de la entidad con sede en Alicante a la propuesta, hasta entonces amistosa, de fusión trasladada por el órgano homólogo de su competidor.
Desde la víspera de aquel último día de abril, los títulos de Banco Sabadell acumulan un avance del 12,8%, cimentado en la última semana, en la que las acciones de la entidad opada acumulan un avance ligeramente superior al 5%.
El mercado aguarda con expectación las cuentas semestrales del Sabadell, dado que algunos analistas consideran que podría ser un factor clave para ajustar la valoración del banco. Eso llevaría a BBVA a reconsiderar una eventual mejora de la propuesta, pese a la insistencia de sus principales ejecutivos, en especial de su presidente, Carlos Torres, a la hora de negar la existencia de un potencial margen para hacerlo.
De hecho, otro de los efectos derivado de las cotizaciones de ambos bancos conforme se aproxima la publicación de las cuentas ha sido el acercamiento de las acciones de Banco Sabadell a la contraprestación que, en forma de canje de títulos, planteó BBVA en la propuesta amistosa de fusión y que después mantuvo en la OPA.
Se acerca al precio de la OPA
Tras el cierre de sesión de este lunes, Banco Sabadell cotiza en 1,997 euros, a menos de un 5% del precio equivalente que propone su potencial comprador, consistente en la entrega de una de sus acciones por cada 4,83 títulos de la entidad de origen catalán.
De hecho, en ningún momento de este proceso la cotización de Banco Sabadell se ha acercado a esta contraprestación, pero en determinadas fases la distancia se ha aproximado al 8%.
Banco Sabadell ya sorprendió positivamente al mercado con sus resultados del primer trimestre, que se conocieron apenas unos días antes de que BBVA trasladara formalmente la propuesta de fusión. Por entonces, poco más de tres meses después de iniciarse 2024, la entidad ya trasladó al mercado una revisión al alza de algunas de las guías que había comunicado a los inversores en las primeras semanas de enero, en coincidencia con la publicación de las cuentas de 2023.
En concreto, el consejero delegado, César González-Bueno, anunció que el nuevo objetivo de rentabilidad para el conjunto del año se situaba por encima del 12%, precisamente la meta que se había fijado previamente y que superaba en medio punto a la registrada al cierre del ejercicio anterior.
El mercado espera que el Sabadell mantenga la tendencia y presente una evolución más que positiva, pese a que los márgenes de intereses de las entidades comienzan a reflejar la progresiva reducción de los tipos en los diferentes tramos de la curva, por efecto de la primera rebaja decretada por el Banco Central Europeo en el precio oficial del dinero en la zona euro.
Posteriormente, como parte de la respuesta negativa del consejo de administración a la propuesta de fusión de BBVA, Banco Sabadell hizo pública su estimación de distribuir entre sus socios un exceso de capital de 2.400 millones de euros adicionales en los años 2024 y 2025.
Cerca de 11.000 millones
Esta cifra apuntalaba la opinión del órgano de gobierno del banco de que la oferta de su competidor no valoraba de forma adecuada al Sabadell y, sobre todo, su potencial de crecimiento en los próximos años. Un potencial cuya dimensión quedará más clara tras conocer las cuentas que la entidad hará públicas en las próximas horas.
Por lo pronto, su capitalización bursátil se sitúa al borde de los 10.900 millones de euros tras el cierre de la primera sesión de la semana. Desde que trascendió el interés de BBVA por volver a intentar la fusión, el valor bursátil del Sabadell se ha incrementado en algo más de 1.260 millones de euros. No obstante, desde que comenzó 2024 y hasta que se conoció la nueva ofensiva de BBVA, Sabadell había logrado elevar su capitalización cerca de 3.500 millones de euros, catapultada por noticias positivas como la de los resultados.
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