Associació d'Apartaments Turístics de Barcelona (APARTUR) eleva el tono contra el Ayuntamiento por la revocación de licencias en 2028 anunciada por el alcalde Jaume Collboni. La patronal de pisos turísticos ha tachado la medida de “expropiación”, ha insistido en que recurrirán a las autoridades europeas y ha amenazado con reclamar indemnizaciones milmillonarias al consistorio y a la Generalitat.
Así las cosas, ha reclamado ser “parte de la solución” en el drama de la vivienda y ha propuesto destinar a programas sociales los 100 millones de euros que recaudan tanto los pisos como los hoteles de la capital catalana mediante la tasa turística cada año. Concretamente, propone crear una ayuda mensual de 500 euros para garantizar el derecho a la vivienda de 16.000 familias vulnerables.
“Expropiación ilegal”
“La Administración quiere llevar a cabo una expropiación forzosa de un derecho adquirido pero sin indemnización, cosa que es ilegal”, ha afeado Marian Muró, nueva vicepresidenta. Para el presidente, Enrique Alcántara, la medida “no saldrá adelante porque es inconstitucional y va en contra de las directrices de la Unión Europea”; también genera una enorme inseguridad jurídica.
Ambos han aplaudido, además, que el Tribunal Constitucional (TC) haya dado “un primer paso” al admitir a trámite la denuncia del Partido Popular. También han informado de que trabajan para presentar una reclamación ante la Unión Europea -una vez los nuevos cargos tomen posesión tras las elecciones- y que exigirán miles de millones de euros al consistorio y probablemente a la Generalitat para indemnizar a propietarios y gestores.
Por todo ello, y debido a la poca definición de este “anuncio político” (que incluso contempla una prórroga de cinco años pasado 2028), dan por hecho que la revocación no se materializará.
Aumento de precios
La pérdida de los 10.000 pisos turísticos de la ciudad y sus 60.614 plazas, lejos de permitir aliviar el drama de la vivienda -siempre según los expertos- encarecería de forma "desorbitada" los precios de los hoteles, al no encontrar competencia. El sector perdería el 40% de la oferta "y una familia normal no podrá visitar Barcelona", sostiene APARTUR, para la que todo ello "la haría inviable como capital turística mundial" y haría decrecer su economía.
En paralelo, los 2,5 millones de turistas que duermen en una vivienda un impacto económico de 347 millones de euros; de cada euro que gastan en su alojamiento, destinan otros tres a servicios de la capital catalana. Así pues, las actividades económicas que se nutren del turismo se verían mermadas. "Restauración, museos, festivales como el Primavera Sound, macroeventos como el Mobile World Congress o la Copa América de vela...", ha enumerado Alcántara.
Reclaman ser "parte de la solución"
La patronal plantea que "el turismo sea parte de la solución" y destinar los 100 millones de euros recaudados mediante la tasa turística a "subvencionar 16.000 pisos de familias que necesiten alojamiento". También ha afeado que el consistorio le rechazara esta propuesta anteriormente y que haya destinado parte de estos recursos a climatizar escuelas y no a aliviar el drama de la vivienda.
Alcántara y Muro han aprovechado el encuentro con periodistas celebrado este jueves para recordar que el sector reclama medidas que incentiven la vuelta de la oferta del alquiler permanente, así como la recalificación de suelo para convertirlo a residencial y la conversión de oficinas a viviendas.
Verano "bueno pero atípico"
APARTUR prevé un "buen verano" con una ocupación del 85% de las plazas, siendo este el tope realista de los 10.000 pisos turísticos de la Barcelona. Tres cuartas partes de las reservas las han hecho familias y contempla unos precios ligeramente superiores respecto a 2019, el año de referencia previo a la pandemia de Covid.
Aun así, la temporada estival se presenta "atípica". Alemania y Francia concentran la presión turística de la primera mitad del verano al organizar la Eurocopa y los Juegos Olímpicos. No obstante, la celebración de la Copa América de Vela previsiblemente "compensará" los turistas que no han visitado la ciudad y estirará el verano hasta principios de octubre.