El presidente de BBVA, Carlos Torres (i), y el de Banco Sabadell, Josep Oliu (d)

El presidente de BBVA, Carlos Torres (i), y el de Banco Sabadell, Josep Oliu (d) Fotomontaje de CG

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¿Desencanto? Los títulos de Banco Sabadell vuelven al precio previo al anuncio del BBVA

La entidad objeto de una OPA hostil ve cómo se esfuma el avance que acumuló desde que se conoció el primer acercamiento, de carácter amistoso, del banco vasco

14 junio, 2024 00:00

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Casi 45 días después de que trascendiera por primera vez que BBVA volvía a la carga para una fusión con Banco Sabadell, las acciones de este último han vuelto al precio al que cotizaban poco antes de conocerse la nueva ofensiva de la entidad de origen vasco. Por medio, el rechazo a una maniobra amistosa y una OPA hostil que ha despertado una cuasi unánime repulsa en el panorama socioeconómico y político y que, con el paso del tiempo, parece incluso que también crea desencanto entre los inversores.

Este jueves, los títulos de Banco Sabadell cerraron en 1,78 euros tras moverse durante buena parte de la sesión en el entorno de 1,77. Justamente, la cotización previa a la jornada del pasado 30 de abril, en la que una información emitida por el canal británico Sky News desvelaba que habría segunda parte del intento llevado a cabo a finales de 2020 para unir los destinos de la entidad a los del BBVA.

Una de las entradas de la sede de BBVA, en Madrid

Una de las entradas de la sede de BBVA, en Madrid

Desde entonces, las acciones del banco que preside Josep Oliu han llegado a revalorizarse más de un 11%, con máximos intradía por encima de la cota de 1,97 euros. 

Sin embargo, en los últimos días el interés por la operación parece haberse esfumado. El Sabadell no ha mantenido el tono alcista y ha procedido a desandar el camino recorrido durante las últimas semanas mientras que BBVA acumula una penalización superior al 16% desde que anunció la propuesta de fusión que trasladó de manera oficial aquel último día de abril al consejo de administración de su competidor.

El rechazo a esta oferta derivó en una OPA de carácter hostil que ha puesto de acuerdo a patronales, reguladores, Administraciones públicas de Cataluña y Comunidad Valenciana (los territorios de mayor implantación de Banco Sabadell) y sindicatos a la hora de rechazarla con vehemencia. 

Por ahora, de poco han servido los intentos por parte del presidente de BBVA, Carlos Torres, de endulzar la maniobra y explicar la bonanza de la operación sobre el terreno. Los argumentos en contra de una eventual absorción del Sabadell por el que sería su propietario en el caso de que la OPA se resolviera con éxito se basan en los fuertes impactos negativos que tendría para el empleo y también para la oferta de servicios financieros a los ciudadanos, que se reduciría de forma notable.

Argumento superado

Lo cierto es que ese desencanto ha permeado en el mercado; la trayectoria de las acciones de Banco Sabadell así lo muestra y, además, dejan en entredicho una de las premisas que ha defendido desde el primer momento BBVA, en el sentido de que no era posible mejorar o elevar la contraprestación de la oferta.

Después de casi un mes y medio, y sin modificación de las condiciones, las acciones en poder de aquellos hacia los que va dirigida la OPA siguen en el mismo punto tras un recorrido de ida y vuelta.

Edificio sede de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) en Madrid

Edificio sede de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) en Madrid EUROPA PRESS - Archivo

Mientras, en todo este tiempo, el canje fijado en la oferta que BBVA presentó formalmente y que fue admitida a trámite esta semana por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) tampoco ha llegado a ser superado por la diferencia en la cotización de ambos títulos.

Al cierre de este viernes, la ecuación propuesta por la entidad de origen vasco otorgaría una prima de algo menos del 6% a los socios de Banco Sabadell, que entregarían acciones valoradas en 8,6 euros a cambio de una de 9,11 euros. Una proporción que se ha mantenido de forma estable desde que BBVA anunciara la oferta no deseada ni solicitada por Banco Sabadell, el pasado 9 de mayo.

Tras la citada admisión a trámite de la OPA, que se ha demorado algo más de lo habitual, la próxima cita tendrá lugar durante la primera semana de julio, cuando BBVA someta a sus accionistas, reunidos en junta extraordinaria, a la aprobación de la ampliación de capital que servirá para emitir las nuevas acciones que permitirían afrontar el canje de títulos previsto en la oferta.

Semanas después llegará el turno de la presentación de resultados semestrales, un hito que se aguarda con expectación dado que algunos expertos consideran que será un instrumento de medida adecuado para determinar si la oferta de BBVA minusvalora el potencial del Sabadell, como sostiene el consejo de este último.

2.400 millones para el accionista

Tanto en el comunicado de rechazo de la propuesta de fusión amistosa, del pasado 7 de mayo, como en su reciente intervención en la conferencia de Goldman Sachs en Madrid, Banco Sabadell ha hecho hincapié en su capacidad para distribuir entre sus accionistas un exceso de capital de 2.400 millones de euros entre 2024 y 2025.

Una cifra que considera que no está incluida en la oferta y que, por lo tanto, deja a los socios del Sabadell sin beneficiarse de la capacidad del banco vallesano para crecer, elevar su rentabilidad y generar capital por sí mismo.